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Adam Driver: “Con Terry Gilliam, el caos forma parte del viaje”

El actor protagoniza 'El hombre que mató a don Quijote', el filme al que el ex Monty Python ha dedicado 25 años de su vida

Adam Driver y Terry Gilliam, en el rodaje de 'El hombre que mató a don Quijote'. En vídeo, el tráiler de la película.
Gregorio Belinchón
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Antes de actor, fue marine. Y eso aún se le nota a Adam Driver (San Diego, 1983). Es amable, pero serio, y cuando suelta un chiste lo hila en un tono de voz que no altera ni la frase anterior ni la posterior dentro de sus prolijas explicaciones. En sus espaldas recae el peso del protagonismo de El hombre que mató a don Quijote, de Terry Gilliam, un papel que empezó Johnny Depp y por el que pasaron Ewan McGregor y Jack O'Connell. Driver está acostumbrado a la presión, que para eso encarna a Kylo Ren, el hijo de Han Solo y Leia, en Star Wars (saga de la que no se puede preguntar a Driver). Ante cinco periodistas españoles el último día del pasado festival de Cannes asegura tener solo buenos recuerdos del rodaje, "un trabajo estupendo", antes de empezar a reconocer un cierto escaqueo cultural: "Se supone que tenía que haber leído el Quijote en el instituto, pero me lo salté. Solo conocía la leyenda. Me parecía el típico libro de lenguaje inaccesible. En cambio, tras leerlo ahora, he descubierto su bello lenguaje, y una estructura y unos trucos -como las historias dentro de la historia- que me sorprendieron".

Driver habla de Gilliam con cariño: ""Es muy entusiasta, un poco como Spike Lee [en Cannes, Driver también presentó BlacKkKlansman, de Lee], aunque luego no se parezcan mucho más. Terry es muy físico, casi caótico, es incapaz de estarse sentado. Y es cristalino: te demuestra si le ha gustado la toma lo mismo que se arranca si le ha parecido mala, aunque no te lo puedes tomar de forma personal, porque lo hace por el bien de la película". El actor recuerda que en el rodaje había motos, caballos, siete idiomas... "Y ahí Terry es el rey". Al interpretar a un director que filmó una versión del Quijote, ¿no copió algo del ex Monty Python? "Creo que cuando en pantalla asumo el rol de Sancho Panza soy Terry". Tras años de papeles más sobrios, Driver presentaba dos comedias en Cannes. "Yo no tengo ningún plan premeditado. Yo escojo según me van llegando los guiones. Y me rijo por este orden: el cineasta, si yo le sirvo a ese director, el guion y el reparto".

Para Driver, "hacer una película llega a ser una experiencia abstracta, con gente con la que formas una familia y luego no vuelves a ver". Algo que le gusta, aunque aquí se acentuara la mezcla de realidad e irrealidad. "El rodaje dentro del otro rodaje incentivó esa sensación. Pero nunca perdimos el norte, porque Terry nos guio. No podía dejar que se le escapara la oportunidad tras 25 años persiguiendo su sueño. Y aprovechó cada accidente. Con Terry el caos es parte del viaje".

El actor no tenía una idea preconcebida de España, "más allá de lo que me habían contado de su belleza". "Y ha superado mis expectativas. Y el equipo español resultó tan profesional como acogedor, amistoso, como en realidad debería de ser siempre. Viví en Madrid durante el rodaje y, efectivamente, confirmé que nunca dormís". Como Sancho Panza, Adam Driver no cumple el arquetipo de bajito rechoncho. En cambio, con el tiempo se acercará más a don Quijote... ¿recuperaría este personaje? "Pregúntame dentro de 20 años, pero, ¿por qué no?".

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Sobre la firma

Gregorio Belinchón
Es redactor de la sección de Cultura, especializado en cine. En el diario trabajó antes en Babelia, El Espectador y Tentaciones. Empezó en radios locales de Madrid, y ha colaborado en diversas publicaciones cinematográficas como Cinemanía o Academia. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense y Máster en Relaciones Internacionales.

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