“Me ha fascinado ‘Fallen Angels’, el nuevo álbum de Bob Dylan”
El crítico teatral y columnista de EL PAÍS charla los miércoles sobre obras, actores, series...
El crítico teatral y columnista de EL PAÍS charla los miércoles sobre obras, actores, series...
1Emilio Ballester 18/05/2016 12:58
¿Ha visto la adaptación al cine de “El rey tuerto”, de Marc Crehuet? ¿Es tan buena como la función?
Mejor, incluso, Alberto. Espléndida comedia negra “a la italiana”, de ahora mismísimo, escribí cuando el estreno de la función: “Hace pensar en un episodio de aquellos “Monstruos de hoy” guionizados por Scola y Scarpelli, o en lo mejor de Darío Fo”. El anuncio, muy sintético, dice: “Un antidisturbios. Un antisistema. Una cena”. Yo hubiera completado: “Un antidisturbios. Un antisistema. Sus mujeres. Una cena. Y un político”. Los cuatro protagonistas (Miki Esparbé, Alain Hernández, Betsy Túrnez, Ruth Llopis y Xesc Cabot) siguen estando formidables, pero la historia en pantalla es todavía más oscura, más claustrofóbica, más desasosegante. Marc Crehuet tiene un talentazo. Y sus cómicos, claro está.
2Antonia Iborra 18/05/2016 13:01
Señor Ordóñez, ¿ha escuchado "Fallen Angels", el nuevo disco de Bob Dylan? ¿Qué le ha parecido? A mi me ha encantado.
Hola, Antonia. Lo escuché aquí mismo, en la primicia del diario, y también me fascinó: preciosísimo disco. Todo mi respeto para “Shadows in the night”, el anterior, pero era demasiado espectral y arrastrado para mi gusto. Aquí hay más alegría y una belleza más serena. Y diría que está mejor cantado, con la voz más diáfana. Me recuerda a “As Time Goes By”, aquella joya de Bryan Ferry (aunque allí había más melancolía) pero, sobre todo, al viejo Hoagy Carmichael, de quien canta la diamantina “Skylark”. Me gusta esa soberbia banda de cuerdas, que parece tocar desde un bar hawaiano. Y Dylan está más “cool cat” que nunca. Me imagino ese disco producido mano a mano por Woody Allen y Robert Crumb. Dylan está haciendo ahora una especie de “Selfportrait 2”. Precisamente en aquella época empezó a reivindicar ese maravilloso repertorio y se le echaron encima por cantar “Blue Moon”, por ejemplo. Escucha también, por ejemplo, “Pretty Saro”, que no incluyó en su día y la recuperó en “Another Self Portrait” hará unos pocos años. Y no te olvides de ese gran río de música americana en una sola canción que es “Blind Willie McTell”.
3Miguel Ángel Herrero 18/05/2016 13:10
¡Saludos, Marcos¡ Aparte de haber iniciado "State of the Nation", obra en mi poder el último libro de Michael Bilington, "The 101 Greatest Plays" donde menciona en su selección hacia el final a un dramaturgo totalmente desconocido para mi. Hablo de Jez Butterworth. De él destaca su obra "Jerusalem". ¿Qué me puedes contar de Butterworth, Marcos? No lo conocía en absoluto. Gracias por estar al otro lado.
Hola, Miguel Ángel. Aquí seguimos (y viceversa: gracias). Veo en el libro de Billington que selecciona tres clásicos españoles (“Fuenteovejuna”, “El castigo sin venganza” y “La vida es sueño”), pero del siglo veinte en adelante solo “La casa de Bernarda Alba”. Cosa frecuente en el teatro británico: nuestro teatro sigue siendo un gran desconocido. Descubrí a Jez Butterworth en el “pack” de “In-Yer-Face Theatre”, el libro de Aleks Sierz. A finales de los noventa vi su debut, “Mojo”, en el Royal Court. Tengo un recuerdo vago: una historia de gángsters y gente del rock en el Soho. Muy bestia, muy rápida, pero no me dejó mucha huella. Un poco en la línea de películas como “Lock & Stock”, de Guy Ritchie, que creo que se hizo poco más tarde (aunque tengo mejor recuerdo de esa película). Butterworth llevó luego “Mojo” al cine, con Harold Pinter en uno de sus habituales roles truculentos. Su gran éxito (en Inglaterra y en Broadway) fue “Jerusalem” (2008), con Mark Rylance como un “dealer” turbio, filosófico y seductor: una especie de temible flautista de Hamelín.Intenté verla un par de veces, primero en el Court y luego en el West End, pero no había entradas: Rylance se había llevado varios premios (luego ganó el Olivier y el Tony, si no recuerdo mal) y había bofetadas para verlo. Le vi al año siguiente en “La Bête”, de David Hirson, donde estaba arrasador (y se pasaba varios pueblos) en el papel que Jordi Bosch hizo en el TNC.
4Alex Alex 18/05/2016 13:12
¿Que puedes decir sobre la pelicula "Los visitantes la lían"? Gracias.
Hola, Alex bis. No me llamaron la atención las dos primeras entregas, así que tampoco he visto la tercera. Lo siento.
5seudonimo pseudonimo 18/05/2016 13:15
Buenos días, Muy buenas las memorias de Simic. Me gusta mucha el documental Mascaras que protagoniza Pou. ¿Ustedes dos no han pensado en hacer un libro de conversaciones sobre el mundo del teatro, la interpretación , figuras destacadas, la crítica, anécdotas…?, también me gustó mucho su : Telón de fondo. ¿Algún otro documental interesante sobre procesos creativos, música, teatro, cine, pintura?
Hola, SP. Me alegro de que te gustaran las memorias de Charles Simic. Y "Telón de fondo". Y desde luego, “Máscaras” era un documental estupendo sobre el trabajo actoral. Con el gran Pou llevo hablando, ahora que caigo, hará la friolera de casi treinta años, y siempre es un enorme placer y una fuente de conocimientos: Pou es pasión teatral (y cinematográfica, y musical, y vital) en estado puro. Nos planteamos hacer ese libro que dices hará una década o más, pero siempre se nos cruzan trabajos (y que no decaiga). En los noventa quisimos hacer juntos otro sobre la historia de los musicales en España, pero tampoco pudo ser. Si hubiera grabado todas las charlas con Pou tendría una enciclopedia. ¿Documental sobre “procesos creativos”? Buf. Sería una lista muy larga. Voy a seleccionar mucho, que tampoco sobra el tiempo. De cine, pilla el maravilloso documental sobre Hitchcock y Truffaut, de Kent Jones. De teatro, “Tightrope” (El funambulista”), una clase magistral de Peter Brook filmada por Simon Brook (lo encontrarás en Movistar). Y una de las mejores películas sobre pintura que he visto (ficción, no documental) es “La belle noiseuse”, de Jacques Rivette. Continuará.
6Ignacio Galan 18/05/2016 13:35
Hola Marcos. ¿Qué te parece la Programación del Festival de Mérida? ¿Alguna obra despierta tu curiosidad? Un saludo
Hola, Ignacio. Ahí va un repaso ultrarápido (y sobre el papel, claro). Por lo que veo, “La décima musa” es un recital de canciones de musicales “con tema clásico grecolatino” a cargo de Paloma San Basilio, dirigida por Josep Maria Mestres, en coproducción con el Romea. También han elegido un Racine poco visto, “Alejandro el Grande” (imagino que reducido, porque son cinco actos), con Unax Ugalde, Marina San José y Amparo Pamplona, entre otros. Dirige Luis Luque. No sé qué podrá ser “Los hilos de Vulcano”, que se presenta como una comedia sobre las infidelidades de Afrodita, dirigida por Marta Torres, con el grupo Toom-Pak: ahí están Verónica Forqué, Fele Martínez, Tomás Pozzi y Nur Al Levi, entre otros. De nuevo “Lisístrata”, ahora a cargo de Jose Carlos Plaza, diría que en clave musical, porque protagonizan Estrella Morente, Aida Gómez y Antonio Canales, con partitura de Juan Carmona. Lo más singular de todo es, para mí, la exhumación de la humorada “Los Pelópidas” (1966), del olvidado Jorge Llopis (de quien recuerdo “Niebla en el bigote”, “Todos eran de Toronto” o el poemario paródico “La rebelión de las musas”), a cargo de la compañía extremeña Suripanta, a las órdenes de Esteve Ferrer. No conozco “Aquiles, el hombre”, de Roberto Rivera, que dirigirá José Pascual. Ni “Marco Aurelio”, debut del dramaturgo Agustín Muñoz Sanz.
7Fernando Peñarroya 18/05/2016 13:38
Señor Ordóñez, en casi todos sus libros describe muy bien los momentos de arrebato, en el sentido que le daba Iván Zulueta: esos instantes extáticos que llegan de forma inusitada por una imagen, una música o un recuerdo y funcionan como una ventana a otra dimensión. Prefiero llamarles arrebato porque lo de epifanía ya está un poco gastado. ¿Le ha sacudido alguno recientemente?
La otra tarde me llegó, como suele pasar, del modo más inesperado: en lo alto de la biblioteca de mi madre, con las páginas amarillentas y cayéndose a trozos, reencontré “El barrio de Santa Cruz”, uno de mis mapas de infancia. Fue tenerlo entre las manos y casi sentir una alucinación olfativa, a caballo entre Maderas de Oriente y colonia Galatea. Era un libro cursilísimo de Pemán, publicado en los años 30, que mi padre le regaló a mi madre cuando eran novios. ¿Cómo llegó a gustarme tanto aquello? Tendría seis, siete años. Y está claro que entonces me encantaba. Debí leerlo mil veces, porque descubrí que me sabía algunos poemas de memoria (como “Soleá”: “Ovillo de cal y sol: / entre vueltas y revueltas / ¿dónde está tu corazón?”) pero lo que realmente me pegó el arrebatazo fueron las ilustraciones, unas xilografías en blanco y negro de Teodoro Miciano como un insólito album de cromos. Al girar la esquina de una página me topé con el dibujo de unas flores, sobrevoladas por una golondrina, en la tapia del Callejón del Agua, y volví a verme muy crío, solo en casa, una tarde de verano, absorbido, devorado por aquellas imágenes. Y en aquel país.
8Sandra Bartleby 18/05/2016 13:40
Buenos días, me han hablado bien de una obra titulada "Afterwork" que se representa en el Teatro Alfil de Madrid. ¿La has visto? ¿Me la recomendarías?
No la he visto, Sandra. Demasiados estrenos, como siempre. Me dicen que la comedia de David Barreiro ha vuelto al Alfil porque funcionó muy bien la temporada pasada. A ver si la pillo.
9Fernando Peñarroya 18/05/2016 13:42
¿Qué libros interesantes ha leído últimamente (o está leyendo)?
Hola, José. Este mes he viajado a la Argentina feroz de los setenta de la mano de María O’Donnell y el gran reportaje “El secuestro de los Born” (Debate), una historia (con un rescate de sesenta millones de dólares) que revela las miserias de montoneros, militares y cúpula política: serie negra, negrísima, en estado puro, a complementar (los recomiendo también: se encuentran en internet o librerías de lance) por “Galimberti”, de Larraquy y Caballero (Aguilar), un personaje que de puro desmesurado parece de ficción, y “Memoria del miedo”, del corresponsal Andrew Graham-Yooll, que editó Asteroide. He seguido en Argentina, la Argentina de anteayer, con “Casi nada que ponerte” (Libros del Lince), de Lucía Litjtmaer: otra historia real, en muy distinta clave, muy original, contada con gracia, brío y claridad, que hubiera seducido por igual a los hermanos Coen y a Manuel Puig. También he devorado (nunca mejor dicho) el utilísimo “La guía gastrocómica: dónde comen los actores y actrices en sus giras por España” (Roca Editorial), de María Díaz, que conviene leer a pequeñas dosis porque da un hambre tremenda. Ya se sabe que hay que fiarse de los restaurantes frecuentados por camioneros (en carretera, claro) y actores (en ruta, y en gira, y en cualquier lado). Única pega: como no vienen los precios, cuesta un poco deducir si son económicos o te pegan un cañazo, pero las recomendaciones son fetén. Por la noches estoy releyendo con gran placer “El arte de la fuga” (Anagrama), de Sergio Pitol, y “Notes del capvesprol” (Destino), de Josep Pla. Y en breve quiero hincarle el diente a “Cuaderno de dirección” (La Pajarita de Papel), las notas y apuntes de Stanislavski en los comienzos del Teatro del Arte, que acaba de salir.
10Dolors Iborra 18/05/2016 13:45
Sr, Ordóñez, ¿Le gustan las canciones del grupo Manel?
Hola, Dolors. Me gustan mucho Manel, desde que salieron. Tienen escritura (misterio e ironía, que no abundan) y composición. Cuentan historias redondas y con eco en pocos minutos: en el último disco, por ejemplo, “Les cosines”, que parece una película de Truffaut o Chabrol, o esa estupenda “road movie” que es “BBVA”. Me gusta ese tono cercano a los primeros Talking Heads en “Sabotatge”. Y el contraste entre la letra oscura y el ritmo regatónico de “La serotonina”, con la que esquivan un trastazo que podía haber sido fatal. Les pediría que sonorizaran mejor las voces: trabajan mucho las letras y cuesta un montón entenderlas. Y quisiera también que sacaran un doble en directo o un disco con versiones, como su estupenda adaptación de “Common People” de Pulp.
11sergio barrio 18/05/2016 13:52
Marcos, buenos días. En teatro la gran Lola Herrera vuelve a ser Carmen Sotillo de Delibes en Cinco Horas con Mario, tras años desde su estreno por vez primera. Seguro que triunfa, al igual que los andaluces Atalaya que montan "así pasen cinco años" de Lorca en el CDN, obra que ya hicieron en sus inicios. También obras eternas del Teatro y muchas veces representadas como Hamlet, ahora con Kamikaze o Celestina con la CNTC, están llenando. En la música vemos que cuatro de nuestros mejores intérpretes vuelven a juntarse para varios conciertos tras 20 años desde "el gusto es nuestro" Víctor, Ana Belen, Miguel Ríos y Serrat. Que tienen todos en común? Pues que aunque son grandes e interesantes propuestas, le preguntó: Cree que hay, en parte, una carencia de nuevos creadores o compositores con ideas novedosas, frescas, diferentes a todo lo anterior y es por eso que se rescata del pasado lo que una vez ya funcionó o cree que el público demanda y quiere ver lo que otras veces triunfó, sobretodo mi generación que éxitos como los de Cinco Horas con Mario sólo los conocemos por la prensa? Se a perdido un poco ese factor de arriesgarse con propuestas más atrevidas? Quien diría usted que está apuntando maneras como algo diferente a lo demás ? Gracias por su tiempo, un abrazo desde Palencia, donde hay mucha afición al teatro.
Hola, Sergio. El teatro (como la vida en general) siempre es un vaivén entre lo nuevo y lo que vuelve. Esto es una obviedad, pero cierta: no hay como ir cumpliendo años para darse cuenta de ese “corsi recorsi”. Está muy bien, a mi juicio, que los intérpretes que siguen con fuerza y sabiduría vuelvan a la carga, porque el escenario es su lugar. Y artistas nuevos siempre aparecen. Con dificultad, porque algunos productores y programadores tienen poca tendencia a arriesgarse con lo no bautizado, pero van saliendo: no me quejo. La semana pasada vi una función estupenda en el Nacional catalán: “Victòria”, la nueva obra de Pau Miró, que debería verse pronto en toda España. Y esta semana quiero ver en la sala Max Aub de las Naves del Matadero “Tierra del fuego”, de Mario Diament, dirigida por Claudio Tolcachir, de la que me han hablado maravillas. Si echas un vistazo a todo lo que he ido escribiendo esta temporada en “Babelia” me ahorrarás hacer una lista (que siempre es latosa) de cosas nuevas y buenas. Gracias por tu interés.
12Antonia Iborra 18/05/2016 13:53
¿Qué puede contarme de “Battlefield”, lo nuevo de Peter Brook?
Corre a reservar entradas, Antonia, porque son solo cuatro días en los madrileños Teatros del Canal: del 9 al 12 de junio. Eso sí, el 11 veo que hay dos funciones, a las 17h y 21 h. “Battlefield” es un fragmento (inédito o, mejor dicho, no montado) del “Mahabharata”. Y, claro está, lo firman también Brook y Marie-Hélène Estienne, a partir de la versión de Jean-Claude Carriére. Se estrenó en otoño en Bouffes du Nord, su sede parisina, y giró luego por Singapur, Tokyo, Francia, Reino Unido (Young Vic), India, Hong Kong e Italia, y en septiembre va a Nueva York. En escena, cuatro actores (Carole Karemera, Jared McNeill, Ery Nzaramba y Sean O’Callaghan) y un músico, Toshi Tsuchitori, intérprete de tambor japonés. La pieza narra la mañana siguiente a la gran batalla entre Pandavas y Kauravas, aquellos dos clanes de la misma familia, que cerraba el “Mahabharata”. Atormentado por los miles de muertos, el rey vencedor, Yudishthira, trata de aprender la lección de la guerra con ayuda de Kunti, su madre, y del rey ciego Dritarashtra, que ha perdido la cotienda. Es una historia breve (una hora y pico) y con pocos personajes, pero ya sabemos que en manos de Brook (que ya ha cumplido los 90) lo más aparentemente sencillo puede alcanzar resonancias épicas.
Me voy a comer, señoras y señores, que con el libro de María Diaz (véase más arriba) me ha entrado gazuza. Durante el chat he escuchado 'Laura Fygi meets Michel Legrand': puro lujo. Desde la Ruta 66 ha pilotado la nave Fernando 'Fender Stratocaster' Navarro. Y desde su palacio de Ferrara, el archiduque Tommaso di Koch. Muchas gracias y hasta el miércoles que viene.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.