Historia de una familia posfranquista
La obra '40 años de paz' explora los traumas de la primera generación nacida en democracia en España
Noche del 23 de febrero de 1981. Un grupo de militares franquistas celebra el golpe de Estado de Tejero en un caserón castellano. Uno de ellos, el dueño de la finca, sale borracho al jardín y cae a la piscina tras sufrir un infarto. Muere feliz, pensando que el golpe ha sido un éxito. Casi cuatro décadas después, como el fantasma del padre de Hamlet, el muerto se le aparece en esa misma piscina a uno de sus tres hijos con una misión: arreglar España.
Con este punto de partida 40 años de paz reconstruye la historia de una familia durante las cuatro décadas de democracia transcurridas en España desde la muerte de Franco. Pero no se trata estrictamente de una obra de teatro político. “Hay un contexto político muy claro, pero no se habla de política. Se habla de lo que le ha pasado en ese tiempo a España a través de esa familia; de cómo la Historia con mayúsculas se entrelaza con la historia personal”, explica Pablo Remón, autor y director de la pieza. ¿Y qué ha pasado en ese tiempo? “Pues lo mismo que les ha pasado a los tres hijos de esta familia: aunque el padre está muerto, su sombra sigue muy presente en sus vidas. Igual que Franco: hace 40 años que murió, pero todavía quedan maneras, actitudes y ecos de aquella época”.
Pablo Remón, cineasta además de autor y director teatral, pertenece a la primera generación de creadores españoles nacidos en democracia. “Pero el hecho de haber nacido tras la muerte de Franco no significa que el franquismo hubiera desaparecido o no influyera en nuestras vidas. Lo que pasa es que no hemos querido hablar de ello hasta ahora. En realidad, no hemos querido hablar de nada relacionado con la política hasta ahora”, afirma Remón. ¿Por qué ahora sí? “La crisis y el 15-M han empujado a los más jóvenes a la política. Y detrás de ellos han ido el teatro, el cine, los creadores”, opina.
40 años de paz es la segunda obra que escribe y dirige Remón, después de haber alcanzado reconocimiento como guionista de cine con títulos como Casual day y 5 metros cuadrados. La primera, La abducción de Luis Guzmán, fue uno de los fenómenos de la temporada pasada en Madrid y también se desarrolla en la meseta castellana. “Es el mejor escenario para contar algunas cosas muy específicas de España”, dice. Lo cuenta sin solemnidades, entrelazando pequeñas historias personales, muy identificables para su generación.
40 años de paz se estrenó el pasado noviembre en los Teatros del Canal de Madrid, en coproducción con el Festival de Otoño a Primavera. Gustó tanto que ahora se repone en otra sala de la ciudad, el Teatro del Barrio, un espacio donde están encontrando acomodo los textos que más abiertamente tratan la realidad sociopolítica actual. No solo eso: a continuación se repondrá La abducción de Luis Guzmán. Pablo Remón es autor de un tercer texto teatral, Muladar (escrito a medias con su hermano Daniel), que ganó el premio Lope de Vega en 2014.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.