Jueves 28 - Recomendaciones de los expertos

Aseguran los rumores que se pensó en Sonic Youth para conmemorar el decimoquinto aniversario de Primavera Sound. Una oferta de la organización no logró doblegar la negativa de Kim Gordon a reunirse con sus antiguos compañeros. La banda neoyorquina que podría decirse inventó los años 90, mezclando arte y posibilismo, rock y experimentación, yace en dique seco desde el divorcio de Gordon y Thurston Moore. Sin embargo, en espíritu estarán muy presente en la actuación del nuevo grupo británico de Moore, con James Sedwards a la guitarra y la bajista de My Bloody Valentine, Debbie Googe. The Best Day, álbum que presentan, ha conciliado a Moore con el legado de Sonic Youth después de discos alejados de aquel universo como el acústico Demolished Thoughts (2011), producido por Beck, y el retro-punk a nombre de Chelsea Light Moving (2013). En vivo, generan temblores sísmicos y rampante psicodelia.

Recomendación de Fernando Navarro: Hiss Golden Messenger (Escenerio Ray-Ban a las 18.05)

En nuestros días, a pesar de que parece todo inventado y existe cierta obsesión retro en lo estilístico, todavía hay propuestas con pose tradicional que merecen la pena ser atendidas. La tradición sonora norteamericana siempre es capaz de amoldarse a sus tiempos y ofrecer interesantes proyectos musicales. Uno de ellos sale desde Carolina de Norte y responde al nombre de Hiss Golden Messenger. Se hacen pasar como otros notables adoradores del folk con envoltorio contempóraneo pero en ellos se respira un espíritu soul elegante y absorbente. A veces, se arriman a JJ Cale, otras a Sly & The Family Stone y otras a The Band. Y siempre con calidad.

Recomendación de Rafa Cervera: Baxter Dury (Escenario Primavera a las 18.55)

Si has crecido escuchando ensayar a la banda de tu padre y has aparecido con este en la portada de su primer álbum, parece como si desde niño el destino estuviera señalándote un camino. Baxter Dury lo siguió, pero eligió uno propio, apartado del de Ian, su progenitor. Su estilo discurre por parámetros muy concretos, más cercanos al indie que a cualquier otra cosa. De este modo, Dury ha ido construyendo una música que a veces recuerda a lo que hace Graham Coxon fuera de Blur. Su cuarto y último álbum, It’s a pleasure (2014), es un buen muestrario de ello, un álbum de canciones pop concebidas por un tipo raro, especialista en sacarle provecho a un aparente minimalismo musical, a unas melodías sencillas que, con el apoyo vocal de su pareja, Fabienne Débarre, contrastan con esa trabajada dejadez tan característicamente suya.

Recomendación de Luis Hidalgo: Kelela (Escenario Adidas Original a las 21.45)

Incluso quien odia el fútbol sabe que Messi es muy bueno. De igual manera no es preciso ser Simon Reynolds para comprender que en un festival The Strokes o The Black Keys garantizan tirón. Fichar a Kelela es más complicado, nadie la conoce y se ignora su futuro alcance. Pero tomemos “The Message”, su último tema publicado, y escucharemos un corte que parece no arrancar nunca, con una excelente voz de sensual negritud planeando sobre unas bases elegantes muy bien perfiladas y contenidas. Una mezcla de soul urbano y rhythm and blues con alma digital define la composición y, por extensión, la obra de esta nativa norteamericana de origen etíope que pese a sus 32 años sólo tiene un excelente mixtape, “Cut 4 Me” y el anuncio de un primer disco para este año que puede confirmarla como un referente del rhythm and blues menos convencional. No le fliparía a Kim Kardashian.

Recomendación de Toni Castarnado: Yasmine Hamdan (Escenario ATP a las 19.00)

No es la primera vez que el director de cine Jim Jarmusch se ocupa de un músico. Con alguno de ellos se obsesionó, caso de Tom Waits, Neil Young, y en menor medida Iggy Pop. Ya fuese actuando en sus películas o dirigiéndoles en documentales, siempre los tuvo en su punto de mira. No conviene olvidar el encuentro entre Waits e Iggy tomando café en “Coffee And Cigarettes”. Con esos referentes exprimidos, el turno ahora es para Yasmine Hamdan, le bastó con tres minutos cantando “Hal” en un club nocturno para esa epopeya vampiresca y onírica de la que resulta “Sólo Los Amantes Sobreviven”. Una cinta con continúas inflexiones musicales, primero en la derruida Detroit, después en las calles enigmáticas de Tanger. Y porqué no, también en Beirut, la cuna de Yasmine Hamdan. Tras sus experiencias con el indie-pop electrónico en Soapkills, debuta en 2013 con el pop distinguido, hipnótico y sensual de “Ya Naff”. Está en la línea de Angelique Kidjo, y a Neneh Cherry la debe tener en un altar. Además, presume de no pertenecer a ningún movimiento cultural concreto, haciendo gala de su libertad vital y creativa.