La incómoda vecindad de la base

La Base Militar de Rota y la incidencia de este enclave estadounidense sobre el paisaje, la población y la cultura de la zona es el tema elegido por Christian Lagata (Cádiz, 1986) para desarrollar su primer proyecto. Un referente que, en su caso, además, tiene una estrecha conexión con su propia biografía, como miembro de una familia asentada en dicho municipio gaditano. Desde el propio título de la exposición, que es el de una conocida canción de Creedence Clearwater Revival, el trabajo centra su atención en la observación y en el análisis de la influencia que tanto la propia base como la cultura americana han ejercido sobre el entorno. Los rastros en el paisaje, fotografiando un territorio limitado y acotado; las marcas en las personas, retratando amigos y familiares que han compartido la experiencia de vivir junto a la base; las contaminaciones en la cultura, registrando señales y bienes de consumo de procedencia o inspiración norteamericana. La propia estética y el tratamiento de las imágenes remiten, acertadamente, a algunos autores referenciales de la fotografía estadounidense de los años setenta, tanto en su lectura del paisaje como en su interés por lo vernáculo. Son fotografías que, en su conjunto, desprenden una densa sensación de malestar y angustia, acercando y asimilando las cicatrices y marcas del territorio a las del cuerpo social. Por contraste, junto a estas fotografías en blanco y negro, tomadas todas ellas desde fuera de la base, el autor incorpora imágenes en color del interior de la misma, que o bien han sido extraídas de la red, o bien han sido realizadas por amigos y conocidos.

El régimen dual de las imágenes, en su contenido y en su factura, y también en el modo de exhibición (unas en pared, otras en marcos digitales), deja ver la división, la tensión y separación entre dos mundos, al tiempo que señala también hacia diversas fracturas y diferencias en el modo de percibir la realidad de este espacio militar. Por otra parte, es interesante observar el modo en que van apareciendo, en lo que ya podríamos denominar como una nueva plataforma o generación de fotógrafos españoles, algunas constantes que también comparte, en este caso, Christian Lagata. Entre otras, se podrían citar: el recurso a la instalación como formato expositivo y su incidencia directa sobre la materialización de los trabajos; la asimilación o lectura de referentes fotográficos, antes como claves culturales o estéticas que como referencias metodológicas; la amalgama de influencias transversales procedentes de diversos campos, y, especialmente, una cierta forma de condensación y resolución del proyecto a través del fotolibro, como el que se edita con ocasión de esta exposición.

Up around the bend. Christian Lagata. Kursala. Paseo de Carlos III, 3. Cádiz. Hasta el 12 de junio.