"La ampliación del MNAC es una utopía"
La directora del museo Maite Ocaña deja el cargo después de cinco años
El martes Maite Ocaña, directora del Museo Nacional de Arte de Catalunya, cumplió 64 años. Poco antes jubilarse y, después de un lustro como responsable de la primera institución cultural catalana, comienza una nueva etapa. En septiembre, después de las vacaciones que comienza mañana, ya no volverá a ocupar su despacho blanco con vistas a las enormes magnolias que conducen al Palacete Albéniz; se incorporará al Instituto de Cultura de Barcelona (ICUB) de la Virreina, sin una misión concreta.
Pregunta: ¿Han sido suficientes cinco años?
Respuesta: No he podido hacer todo lo que queria. Tuve que posicionarme porque, aunque he trabajado toda mi vida en museos, esto es un transanlántico.
P. ¿Se ha sentido respaldada?
R. No del todo. Si las administraciones conocieran más los museos avanzaríamos más.
P. ¿El MNAC necesita más recursos?
R. Todos los museos tienen pocos recursos. No se puede estar creando todo el día cosas nuevas; hay que reforzar lo que hay.
P. ¿Cuál es su mayor logro?
R. Reformar el gótico y el románico. Estoy muy satisfecha; me he divertido y me siento una privilegiada por poder haber hecho toda mi vida lo que me gusta. He aprendido mucho, tanto en el museo Picasso como aquí.
P. ¿Y su mayor fracaso?
R. Tenía que haber defendido como un paladín al gran equipo de profesionales que trabaja aquí. La gestión diaria me ha impedido hacerlo.
P. ¿El polémico proyecto de reforma de Gae Aulenti no se modificó por falta de riesgo o por falta de recursos?
R. Hubiera significado cerrar el románico mucho tiempo y museo cerrado, museo muerto. De todas formas, el proyecto contemplaba esconder dos absides muy flojos dándoles la vuelta, pero no se hizo por falta de dinero.
P. ¿A que se refiere cuando asegura que no encaja en el nuevo MNAC?
R. El MNAC continuará con sus colecciones, espero, pero no creo en que deba asumir la contemporaneidad, sino acabar con el arte de finales de los años sesenta. Hubo un documento consensuado con el Macba donde se establecían los límites entre ellos. Pero de repente, el Macba dijo que no y se acabo la historia. Ahora se vuelve a hablar, pero sería un error. Con la cantidad de instituciones que se dedican al arte contemporáneo, el MNAC no tiene que asumir esto. Aunque creo que se producirá, porque, como en todo, hay modas. Existen 200.000 capillitas que se dedican al arte contemporáneo, y ahí que poner orden, pero yo no seré quien lo haga. No quiero que mis ideas se desordenen.
P. ¿Cree que el MNAC se ha de ampliar?
R. Es una pura utopía porque no hay dinero ni para pagar las jubilaciones. Se habla porque no se ha pensado. Las ideas se extienden como una mancha, cuajan y todos se apuntan.
P. ¿Se ha reunido con Mascarell?
R. Sí, el lunes.
P. ¿De que hablaron?
R. De nada, pero fue muy cordial. Nos conocemos hace años.
P. ¿Que nota se pondría?
R. Un notable muy alto, para mi y para mi equipo, se han hecho muchas cosas.
P. ¿Y si le dicen de continuar?
R. No creo que lo hagan. Con todo lo que estoy hablando...
P. ¿Qué hará ahora?
R. Hay un proyecto, no vinculado con museos... no creo que haya intención de estrujarme profesionalmente.
P. Cómo le hace sentir eso?
R. Tranquila y sorprendida
P. ¿Es un personaje molesto?
R. No lo he sido nunca
P. ¿Qué va a pasar con los 'picassos' y 'torres garcias' que usted consiguió para el MNAC?
R. Los 'picassos' están confirmados un año más, la familia de Torres García lo están pensando.
P. Podrían retirarlos.
R. Sería una gran pérdida.
P. ¿Cómo debe ser la persona que le sustituya?
R. Tiene que tener mucha cintura para negociar y experiencia.
P. ¿Ha comenzado su renovación?
R. Creo que será a la vuelta de la vacaciones.
P. ¿Será mediante concurso?
R. Eso espero.
Babelia
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