María Pagés llena de flamenco el metro de Madrid

La bailaora y coreógrafa María Pagés, galardonada con el Premio Nacional de Danza 2002, ha hecho vibrar esta noche al público en la madrileña estación del Metro de Nuevos Ministerios, con el espectáculo Flamenco Republic, que ha inaugurado la segunda edición del certamen Cumbre Flamenca.

Flamenco Republic, que se estrenó en Estados Unidos en 2001, es un espectáculo que según la propia coreógrafa "no falla" porque "siempre tiene un gran éxito", aunque no ha ocultado que el hecho de llevarlo a las instalaciones del metro ha dado "dificultades" técnicas, aunque contrarrestadas por el acercamiento con el público.

Tras la actuación, María Pagés, considerada una de las figuras más innovadoras del flamenco actual, ha afirmado que "a veces, hay que salir, acercarse, provocar y abrir las ventanas para dejar que la gente mire y nosotros dejar que mire". Se ha mostrado contenta y emocionada, "con la piel de gallina", porque, desde el principio, "todo el mundo estaba con muchas ganas y entusiasmo", al tiempo que ha asegurado que, "en las calles, no sólo hay gente con prisa o preocupada, hoy, que es un día tan señalado -en referencia al aniversario del 11-S -, sino que también hay gente que quiere emocionarse y participar".

Para la bailaora de películas como Carmen (1983) y El amor brujo (1986), de Carlos Saura, este montaje es el más "popular" de la compañía, donde "todo está muy cuidado, muy pensado y tiene un sentido y se pueden encontrar todos los contrastes del ser humano y del flamenco". Flamenco Republic, que cuenta con la participación de ocho bailaores, además de María Pagés, y cinco músicos, crea un país imaginario regido por las leyes del flamenco para, a partir de un comienzo al ritmo de los latidos del corazón, recorrer las emociones humanas.

La felicidad, la tristeza, la ironía y la comicidad se reflejan en el escenario a través de siete cuadros, en los que se aprovechan elementos cotidianos como abanicos, castañuelas, garrotes gitanos y zapateado, para entablar un diálogo acústico y dibujar seguirillas, tarantos, soleás o tangos. El montaje, que arrancó constantes aplausos y ovaciones de los asistentes, recurre a músicos y cantaores de los años veinte, entre los que destacan Rosalía de Triana o el maestro Vallejo. El público abarrotó la carpa dispuesta en el interior de la estación, con el escenario y un aforo con capacidad para 650 personas, como en torno a la pantalla gigante instalada en la entrada.

Nacida en el sevillano barrio de Triana, Pagés empezó a bailar con tan sólo cuatro años y con catorce años se tituló con honores en Danza Española. Los primeros pasos de su carrera los dio en las compañías de Antonio Gades, Mario Maya y en el Ballet de Rafael Aguilar hasta que en 1990 decidió explorar sus propias ideas coreográficas y fundar la Compañía María Pagés, con la que triunfó en las bienales de Sevilla de 1992 y 1994. En 1996, fue nombrada directora de la Compañía Andaluza de Danza y en 2002 se convirtió en la primera bailaora flamenca en recibir el Premio Nacional de Danza en la categoría de creación.

La segunda edición de la Cumbre Flamenca incluirá las actuaciones de El Capullo de Jerez (12 de septiembre), Niña Pastori (día 13), Mayte Martín (día 14) y Enrique de Melchor (día 15).