El Salón del Cómic de Barcelona abre sus puertas con el reto de superar el éxito del año pasado

El 23 Salón Internacional del Cómic de Barcelona ha abierto hoy sus puertas en el recinto ferial de Montjuic con el reto de superar el número de visitantes alcanzado en 2004 en la Estación de Francia, cuando congregó a 92.000 personas. En esta edición se darán cita una numerosa pléyade de autores nacionales e internacionales y, de forma excepcional, la entrada, que cuesta 6 euros, permite el acceso de dos personas.

El cambio de ubicación supone ganar mayor espacio de exposición, hasta un total de 13.000 metros cuadrados, lo que ha permitido aumentar también el número de empresas expositoras, que superan las 135, las áreas de actividades y disponer también de una sala de proyecciones para unas 300 personas.

La novedad del traslado a la Fira de Barcelona y el cambio de fechas, ya que el Salón ha pasado de celebrarse en mayo a transcurrir entre hoy y el 12 de junio, llevan a la organización a ser prudentes en cuanto a la posible respuesta del público este año, aunque confía en que sea positiva e incluso pueda superar la de años anteriores.

Este año y de forma excepcional, la entrada, que cuesta 6 euros, permite el acceso de dos personas, una iniciativa encaminada a que los amantes del cómic vengan acompañados de amigos o familiares.

El certamen congregará este año a un nutrido plantel de autores internacionales, hasta un total de 26, entre los que destacan Ralf Konig, Gilbert Shelton, Bernie Wrightson, Achdé, André Julliard, Zep y varios dibujantes de las factorías de superhéroes Marvel y DC Comics, junto a una veintena de dibujantes nacionales.

Además de la novedad de contar con la sala de proyecciones, el Salón dispone de espacios tradicionales, como el área comercial, un área de fanzines y una sala de actos dedicada a conferencias, mesas redondas y encuentros entre autores y público. También cuenta con un espacio infantil o Comicteca, un taller de cómic y aerografía, donde algunos de los autores invitados impartirán clases magistrales, y el área de exposiciones.

Entre las muestras organizadas por el Salón destacan las dedicadas a Manuel Fontdevila, premio al Mejor Álbum de 2003, a Horacio Altuna, que recibió el Gran Premio del 22 Salón del Cómic por su trayectoria, o a Fermín Solís, que fue el autor revelación el pasado año, mientras que se exhibe otra dedicada al Quijote presentada por la Junta de Castilla-La Mancha.