La designación en el Senado de cuatro consejeros propuestos por el PP culmina la renovación de RTVE

Cuarenta y ocho horas después de una primera votación fallida, y conforme al decreto ley aprobado por el Gobierno para renovar de urgencia RTVE, el Senado ha designado por mayoría absoluta a los cuatro integrantes del consejo de administración que la norma deja a elección de la Cámara alta. La renovación culmina con estos candidatos propuestos por el PP, partido excluido del pacto entre el PSOE y sus socios para la designación en el Congreso de los otros 11 integrantes del órgano de gobierno de la corporación que tuvo lugar la semana pasada, también durante una segunda votación tras no lograr los dos tercios de apoyos previstos en un primer sufragio. Eladio Jareño, Rubén Moreno, Ignacio Ruíz Jarabo y Marina Vila han recibido este jueves 144 votos a favor y 111 abstenciones de un total de 266 senadores que componen la Cámara controlada por la mayoría absoluta de los populares.

Se cumple así la intención que anunció el ministro de Transformación Digital, Óscar López, cuando presentó el pasado 22 de octubre los detalles del decreto ley para RTVE ante su prolongada crisis de gobernanza, el “bloqueo” funcional y la frustrada negociación previa con el PP: “Que haya un nuevo consejo en 30 días”. Además de rebajar la mayoría cualificada de dos tercios prevista legalmente a la absoluta de las Cortes para votar a los nuevos consejeros, la norma aumenta su número de 10 a 15 y establece un mandato para los próximos seis años con dedicación exclusiva —hasta ahora prevista solo para la presidencia— y un salario anual para todos ellos que puede llegar hasta los 100.000 euros. La actual presidenta interina, Concepción Cascajosa, dará el relevo cuando el Congreso designe en los próximos días a su sucesor al frente del órgano de gobierno de la corporación entre los 15 integrantes del nuevo consejo. El elegido aumentará su poder ejecutivo a tenor del decreto, con capacidad para designar puestos de alta dirección y contrataciones sin el concurso previo del consejo de administración.

La más presidencialista de las intervenciones celebradas semanas atrás ante la Comisión de Nombramientos de ambas Cámaras fue la de José Pablo López, anterior director de contenidos de RTVE cesado el pasado marzo durante las turbulentas negociaciones para el fichaje de David Broncano y recuperado por el PSOE para el nuevo consejo de administración. López desgranó sus “principios” rectores para los próximos seis años de la corporación, resumidos en una hoja de ruta basada en evitar la equidistancia y el periodismo declarativo sin contexto; el reflote de la audiencia; una nueva financiación; el adelgazamiento del organigrama directivo; un proyecto propio para Radio Nacional; y el compromiso “con los creadores y todas las Culturas del Estado”.

La lista de nuevos consejeros pactada entre el PSOE y sus socios se completa con Esther de la Mata (hasta ahora jefa de prensa del ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños), Angélica Rubio, Rosa León y Mercedes de Pablos (las cuatro también propuestas por los socialistas); Miquel Calçada Olivella, alias Mikimoto, a propuesta de Junts; Sergi Sol, por ERC; Marta Ribas y María Teresa Martín, por Sumar; Mariano Muniesa, por Podemos; y María Roncesvalles Solana, por el PNV. Junto a los cuatro consejeros propuestos por el PP y refrendados en el Senado, todos ellos relevarán al actual consejo de administración saliente que fue pactado en 2021 entre el PSOE, el PP, Unidas Podemos y el PNV.

El órgano en vías de disolución ha tenido dos presidencias interinas y una anterior dimisionaria. Hasta ahora, mantenía a la mitad de sus 10 integrantes con el mandato caducado, además de una vacante que correspondía a los socialistas. Su composición contaba con tres consejeros a proposición del PP (Jenaro Castro —que dirige y presenta un programa semanal de entrevistas en la noche de La 2—, Carmen Sastre y Consuelo Aparicio, cuyos mandatos están caducados desde el final del pasado marzo); otros tres, a propuesta del PSOE (Concepción Cascajosa, Elena Sánchez —cesada tras José Pablo López durante el asunto Broncano y antecesora de Cascajosa en el cargo desde la dimisión de José Manuel Pérez Tornero en septiembre de 2022, que dejó la vacante que correspondía a los socialistas— y Ramón Colom, este último también con el mandato caducado); dos, por Unidas Podemos (Roberto Lakidain y Jose Manuel Martín Medem); y uno por el PNV (Juan José Baños, con el mandato caducado).

Bronca total entre el PSOE y el PP

Los debates parlamentarios previos a las votaciones se ciñeron a la bronca total entre el PSOE y el PP por el desarrollo de este proceso legislativo —en cuya tramitación del Congreso los populares permanecieron ausentes, al contrario de lo que han hecho en el Senado—, mientras crecían los estragos de las riadas en la Comunidad Valenciana. Durante las intervenciones en el Congreso, el diputado socialista Vicent Sarrià acusó al PP y Vox de considerar “mejor para sus intereses utilizar la catástrofe en Valencia para prolongar el bloqueo del que en gran medida son responsables”. Sarrià también afeó a la diputada popular Macarena Montesinos su intervención en la Comisión de Nombramientos, que posteriormente su grupo abandonó. “Dijo entonces que el decreto [para RTVE] supone la desaparición del servicio público. La única desaparición fue Canal 9 por la catastrófica gestión del PP y por su manipulación. Eso sí que fue colonización, como la que ejercieron en RTVE cuando gobernaron”. Montesinos afirmó en su réplica: “Jamás podrán comprar la opinión crítica de los españoles que les están juzgando por sus actos”.

Los parlamentos cruzados entre socialistas y populares tampoco se quedaron atrás en el Senado. El pasado martes, antes de la primera votación frustrada, el senador del PP Antonio Silván acusó al PSOE de “consumar el asalto de RTVE en tiempo récord y en mitad de la dana”. Silván también justificó la participación de su partido durante el proceso de la Cámara alta con una propuesta de cuatro consejeros en la corporación para “ejercer el control de sus desmanes”. Y afirmó, al margen del objeto de debate, que los socialistas “dicen defender a las mujeres y lo que hacen es sacar a violadores y asesinos a la calle”, así como “dicen que se solidarizan con las víctimas del terrorismo y sacan a los presos a la calle”. La intervención previa del senador socialista Gabriel Colomé alumbró una protesta por que el argumento de la oposición sea que “el PSOE okupa, con k, las instituciones”. Y un reproche al PP: “Intentan ganar con el bloqueo institucional como arma. Su eslogan es Make Spain Great Again”.