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Carta a Vox de un abogado que fue un menor inmigrante de acogida

Sidi Talebbuia logra repercusión con un hilo de mensajes en Twitter sobre su experiencia tras las soflamas racistas del partido de extrema derecha

Sidi Talebbuia en su despacho de abogados de Madrid.
Sidi Talebbuia en su despacho de abogados de Madrid.Kike Para

Sidi Talebbuia, abogado de 33 años y activista por los derechos humanos desde su despacho en Madrid, escribió un hilo de mensajes en Twitter este miércoles que ha logrado repercusión con más de 7.200 retuits en un día. "El partido de ultraderecha vende una imagen de la sociedad española que no se corresponde con la que yo conozco", dice sobre la razón por la que ha escrito esta carta en forma de tuits, que se puede leer al completo al final del artículo.

Sidi Talebbuia nació en 1986 en los campamentos saharauis de Tinduf, en el desierto del Sáhara en Argelia. Con diez años viajó a Sevilla para pasar el verano con una familia española. Tres veranos después se quedó en España de manera permanente, con otra de las familias de acogida, por problemas de salud. "La sociedad española no es racista, ni entonces cuando llegué ni ahora. Muy al contrario", afirma.

La intención de Talebbuia ha sido contar su historia a través de esos textos porque considera que podría ser la de muchos otros niños extranjeros que llegan a España. Su caso no es el de los menores migrantes no acompañados que viven en centros, con problemas de hacinamiento, como el de Hortaleza en Madrid. Él fue acogido de forma permanente por una familia con la que vivió hasta, ya de adulto, independizarse y mudarse a Madrid. Él, por tanto, no tuvo esa categoría de "menor extranjero no acompañado" y se muestra muy preocupado por el uso que hacen los políticos del término "mena", "que pretende desfigurar y cosificar lo que en realidad son niños que están solos y que necesitan ayuda".

Las soflamas para incitar al odio del partido de extrema derecha pone el foco en situaciones que no son nuevas ni excepcionales. "Siempre ha habido robos a punta de navaja, pandillas que quedan para pegarse, minorías al fin y al cabo". El problema para él es que los políticos no desmienten estas falsedades. Se refiere al debate electoral del pasado lunes, cuando ningún político replicó a Santiago Abascal. "Le permitieron que dijera auténticas burradas en horario de máxima audiencia".

La solución, según el activista, está en aumentar los recursos que la Administración destina a los centros de menores "donde no solo hay inmigrantes, también hay españoles". "Este país es más rico que hace veinte años cuando yo llegué, y es verdad que cada vez llegan más niños solos sin sus familias, pero el gesto lo tiene que hacer el Gobierno, es quien tiene que adaptarse a la realidad en lugar de hacinarlos en los centros donde viven como si fueran cárceles", considera.

Talebbuia se trasladó a Madrid desde Sevilla hace 7 años e instaló su bufete de abogados en la calle de Montera. Desde aquí intenta ayudar a familias españolas que están acogiendo a menores inmigrantes de manera voluntaria. Se acercan a su despacho para asesorarse, quieren regularizar la situación de estos niños y ocuparse de ellos. "Si tratas a los niños como perros, se convertirán en perros. Si ningún tutor les marca el camino, dejarán de distinguir lo que está bien y lo que está mal, como nos pasaría a todos", advierte.

Estas familias deciden actuar porque la Administración no está a la altura "y no responde como debería simplemente porque no quiere, es actitud política, no es falta de dinero". En su opinión debería facilitarse el trabajo a estos voluntarios que quieren ayudar, agilizar su trabajo y fomentarlo.

Mientras tanto, las elecciones se acercan y a Talebbuia le preocupa el resultado. "El momento es malo, de crispación, Vox ha recuperado discursos que pensábamos superados como la violencia de género o el racismo, este partido ha normalizado lo que antes era políticamente incorrecto con su discurso de odio. Y añade: "Por eso hay que contestar, siempre, como he hecho yo con mi carta de Twitter: 'Está usted mintiendo, y lo sabe' ".

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