La Fiscalía rechaza la petición de Torra de cambiar la fecha de juicio

La Fiscalía ha rechazado de forma tajante la petición del presidente de la Generalitat, Quim Torra, de retrasar el juicio que debe afrontar por un delito de desobediencia. El ministerio público critica que la defensa de Torra ni siquiera haya planteado una fecha alternativa y pide que se mantenga la fijada por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC): 25 y 26 de septiembre.

Torra se sentará en el banquillo por mantener los lazos amarillos —símbolo de apoyo a los políticos independentistas encarcelados— en la fachada de la Generalitat en plena campaña electoral. Lo hizo pese a que la Junta Electoral Central (JEC) había ordenado retirarlos. El president afronta una petición de un año y ocho meses de inhabilitación; en caso de condena firme, deberá abandonar el cargo.

Tras conocer la inminente fecha del juicio —pocos días antes del segundo aniversario del 1-O y a la espera de conocer la sentencia del Tribunal Supremo sobre el procés—, Torra emitió un comunicado en el que criticó la decisión por precipitada. Señaló, además, que la vista oral coincidirá con el debate de política general en el Parlament, uno de los más importantes del calendario. Anunció “acciones legales”, aunque no concretó si iba a recurrir el señalamiento. El escrito de la Fiscalía oponiéndose al recurso demuestra que sí lo hizo.

Su abogado, Gonzalo Boye —que también es letrado del expresident Carles Puigdemont, huido de la justicia española— argumentó que el señalamiento es “precipitado” y “acelerado”. Recordó que Torra “ocupa la más alta magistratura en Cataluña” y, como tal, “tiene unas funciones, unas obligaciones, una agenda y unas prerrogativas”.

En su respuesta, cargada de ironía, el fiscal Pedro Ariche replica que hablar de prerrogativas “en una sociedad igualitaria y democrática” resulta desafortunado. Y recuerda que todos los ciudadanos deben “conciliar” su vida laboral y familiar con sus obligaciones en los juzgados. “No están ociosos en el sofá de su casa”.

Torra, que ha optado por una estrategia de abierta confrontación, señala que la forma en que el TSJC ha designado la fecha “no sigue los criterios legales”. Denuncia la “falta de imparcialidad” del tribunal y le acusa de “vulnerar la división de poderes”. La Fiscalía dice que esas afirmaciones son “absolutamente desafortunadas” y afea que Torra se queje de que el juicio llega demasiado pronto cuando la crítica habitual hacia la justicia es que es “excesivamente lenta”.

En el comunicado, Torra señalaba que, además del debate del Parlament, los días 25 y 26 su abogado tenía “un señalamiento anterior en una causa con un preso”, que como tal es “preferente”. Pero nada de eso se menciona en el recurso. La Fiscalía recuerda que Torra no ha concretado “motivos o circunstancias de fuerza mayor” para cambiar la fecha.