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Los lazos amarillos siguen envolviendo lo público

Los emblemas que denuncian la situación de los presos lucen en todo tipo de edificios de la Generalitat

Fachada del Plau de la Generalitat con la pancarta a favor de los presos politicos y el lazo amarillo
Fachada del Plau de la Generalitat con la pancarta a favor de los presos politicos y el lazo amarilloMassimiliano Minocri

La reivindicación amarilla sigue envolviendo los edificios públicos de la Generalitat en Barcelona. A primera hora de la tarde de este martes, justo cuando se cumplía el plazo dado por la Junta Electoral Central para retirar estos símbolos de los edificios públicos, los inmuebles en los que la Generalitat reparte sus consejerías y departamentos seguían mostrando el símbolo gualdo.

Según se apagaba su interior, los edificios públicos de paseo de Gràcia y alrededores seguían manifestando al exterior su disconformidad con la situación procesal de los líderes independentistas, y por tanto incumpliendo el mandato de la Junta Electoral que ordenó retirar los lazos antes de la tarde del martes.

Las ventanas del edificio del departamento de Justicia de la Generalitat de la Vía Laietana son el primero de los muchos edificios públicos que muestran al exterior todo tipo de lazos amarillos, desde el tradicional confeccionado con una fina tira de tejido, al impreso en un folio. En las ventanas que dan luz a escritorios de los funcionarios de Justicia también se repite la pancarta con el lema “Llibertat Presos Políticos”. Junto a estas ya habituales proclamas, se entremezclan combinaciones de fotografías en blanco y negro de los políticos presos y huidos de la justicia, y algunos coloridos carteles con los rostros de los líderes al más puro estilo “warholiano”.

A 500 metros de la sede de Justicia, en el edificio del Departamento de la Vicepresidencia y de Economía y Hacienda del que es titular el republicano Pere Aragonès, dos grandes lazos presiden los balcones del primer y segundo piso. De igual forma, en la planta baja un pequeño lazo comparte escaparate con anuncios de la lotería catalana de la Grossa.

Continuando por la Gran Via, la luz de fluorescentes perfila más de una veintena de lazos en los ventanales de la oficina del departamento de Agricultura. Justo enfrente, el Institut Català de la Salut recibe a los visitantes con varios folios con dibujos de lazos amarillos en las puertas correderas de cristal y paredes del hall. Una bienvenida repetida en la entrada del departamento de Territorio y Sostenibilidad con dos inmensos lazos en las columnas de la entrada, y un mural con las caras de los políticos procesados y el número 519, que representa el número de días que llevan en prisión los líderes de ANC y Òmnium, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart.

Más allá de las consejerías y departamentos, otros edificios gestionados por la Generalitat como los de los servicios territoriales, también seguían mostrando estas enseñas. En cambio, algunos lazos visibles en los accesos del Palau Robert fueron retirados al mediodía.

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Al final de la tarde y frente al Ayuntamiento de Barcelona, donde la alcaldesa Ada Colau retiró el pasado jueves el lazo a instancias de la Junta Electoral, varias decenas de personas protestaron en contra de la retirada del símbolo amarillo.

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