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Los promotores construirán 15.000 viviendas este año en Cataluña, un 32% más

El salón inmobiliario Barcelona Meeting Point arranca en plena inquietud por la sentencia del Supremo sobre las hipotecas

Josep Catà
Visitantes en el salón inmobiliario Barcelona Meeting Point.
Visitantes en el salón inmobiliario Barcelona Meeting Point.Marta Pérez (EFE)

El ladrillo vuelve a asomar la cabeza. Después de años sufriendo las consecuencias de la crisis, el Barcelona Meeting Point, el salón profesional del sector inmobiliario, ha abierto este jueves sus puertas con muestras de optimismo. Los promotores ven oportunidades en los mercados español y catalán, especialmente en el área metropolitana de Barcelona. Según los datos de la Asociación de Promotores de Cataluña (APCE) este año se iniciarán 15.000 viviendas nuevas en esta comunidad, un 32% más que en 2017, y se terminarán más de 6.000, una cifra similar a la del año anterior.

Quedan muy lejos los años anteriores a la crisis, en los que el salón Meeting Point era el punto neurálgico de un sector que, en 2006, construyó en Cataluña más de 127.000 viviendas y entregó casi 80.000. Un momento en el que el salón era una efervescencia de negocios que ocupaba tres pabellones de Fira de Barcelona. La edición de este año ocupa un pabellón de 22.000 metros cuadrados. Aunque quedan muy lejos las cifras de hace una década, el optimismo vuelve.

“Yo sigo confiado con que llegaremos, a medio plazo, a las 150.000 viviendas al año en España”, ha dicho Juan Velayos, consejero delegado de Neinor Homes, una de las principales promotoras del país. Esta cifra es la que el sector tiene como meta para recuperar el músculo perdido, “y atender a la necesidad real en España”, ha añadido. Actualmente se están construyendo 80.000 viviendas al año, 15.000 en Cataluña.

La oportunidad está en las áreas metropolitanas, después de que Madrid y Barcelona empiecen a dar “signos de agotamiento”, según Consuelo Villanueva, de Sociedad de Tasación. En estos municipios metropolitanos es donde se concentran las promociones que se exhiben en el Barcelona Meeting Point. En el puesto de Amat Immobiliaris, por ejemplo, solo dos promociones ofertan pisos en Barcelona, mientras que el grueso de la obra nueva se sitúa en poblaciones como Sant Just Desvern o Castelldefels. “En España por suerte hay muchas más áreas que se recuperan, más allá de las grandes ciudades: hay que pensar en Málaga, Sevilla, País Vasco... y no olvidar que este sigue siendo un negocio regional”, ha apuntado Velayos, responsable de una empresa dominada por el capital extranjero.

El optimismo del sector en el salón ha tenido una contrapartida: los promotores lamentan que el negocio sufre “inseguridad jurídica” con la polémica por el impuesto de Actos Jurídicos Documentados (AJD) y la incertidumbre por cuál será la posición que finalmente tome el Tribunal Supremo después de rectificar una sentencia en la que obligaba a pagar el impuesto a los bancos, y no al cliente como hasta ahora. Esta polémica, junto con la medida aprobada por el Ayuntamiento de Barcelona y planteada en otros municipios, que obliga a destinar el 30% de nuevas promociones a vivienda social, son las grandes preocupaciones en el salón, a diferencia del año pasado, cuando la tensión política era el foco de atención. “Creemos que el requisito básico es poder planificar con tiempo y con la seguridad jurídica garantizada”, ha resumido Lluís Marsà, presidente de APCE.

Los jóvenes ni alquilan ni compran

El problema del alquiler y del acceso de los jóvenes al mercado de la vivienda ha sido el objeto de una de las conferencias del simposio de ayer en el Barcelona Meeting Point. Según un informe de Fotocasa, los jóvenes de entre 18 y 34 años alquilan un 39% menos este año que en 2017. Tampoco tienen acceso a la compra, ya que no tienen la estabilidad económica necesaria. Aún así, los expertos, como Juan Carlos Álvarez, de Servihabitat, han descartado un control de rentas por parte de la administración, porque “haría menos atractiva la oferta”.

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Sobre la firma

Josep Catà
Es redactor de Economía en EL PAÍS. Cubre información sobre empresas, relaciones laborales y desigualdades. Ha desarrollado su carrera en la redacción de Barcelona. Licenciado en Filología por la Universidad de Barcelona y Máster de Periodismo UAM - El País.

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