Matadero impulsa un Festival de Literatura Internacional

Matadero revive: este miércoles se ha presentado su programa de actividades para el curso —en el periodo que va de octubre del 2018 a noviembre de 2019— con varias novedades ambiciosas. Entre ellas, un festival internacional de literatura que tendrá lugar en la Casa del lector con vocación de encuentro clásico pero transversal y de referencia. Será una cita que llene en primavera, entre el 28 y el 31 de marzo, lo que otros foros como el Festival Eñe hacen en otoño y que fue anunciado por Rosa Ferré, nueva responsable de Matadero.

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Se trata de una de las actividades que cohabitan en la nueva filosofía transversal del centro. Hasta ahora, el complejo anda dividido en distintos reinos de taifas sin coordinación propia. Ferré, que proviene del Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona, quiere aunar y mezclar actividades, unir iniciativas y hacer de Matadero la referencia que fue hasta hace ahora tres años. "Queremos convertirlo en un laboratorio de pruebas que sirvan a la ciudad y la sitúen ante los retos tecnológicos, ecológicos y creativos que la rodean", asegura.

Por eso ha perfilado un programa que aborda la creación, el debate, la prueba constante y la búsqueda de caminos y salidas para afrontar mejor el futuro, muy centrado en la órbita de regeneración urbana. Entre ellos, aparte del festival literario, destaca Tentacular. Será la cita más inmediata entre el 22 y el 24 de noviembre próximos. Aborda la tecnología desde aproximaciones críticas en un festival de cultura y pensamiento digital para los tiempos que corren. "Las distopías, las redes, las noticias falsas y esas empresas que te ofrecen el todo gratis con ánimo de lucro", afirma Ferré.

Profundidad de Campo es otro de los foros que se han programado. Se dedicará a la creación audiovisual y convivirá en las actividades con exposiciones y conciertos, como los englobados en el apartado Plazas musicales. Este se desarrollará en las Naves de Matadero, dedicadas primero al teatro y ahora a las artes vivas, que ceden espacio para este nuevo proyecto.

Matadero quiere ser también a partir de ahora un centro de estudios críticos en el que se aporten soluciones abiertas a debate. "Con grupos de investigación que planteen desde diversos ángulos en espacios comunes que ayuden a cuestionar nuestra propia contemporaneidad y la transformación de la ciudad", añade Ferré. En ese ámbito se fomentarán seminarios como el Imagina School, dedicado al urbanismo. Además se ofrecerán diversas residencias artísticas para creadores en varios campos.

Acción, diversidad, reflexión. Matadero afronta una nueva etapa, según Ferré, como un centro para la creación y la producción artística en diálogo permanente con su entorno a través de diversas manifestaciones y disciplinas: "Fomentará el encuentro y la contaminación entre diversas visiones", asegura la responsable.