Torra anuncia un foro para esbozar la “Constitución catalana”

El presidente de la Generalitat, Quim Torra, anunció ayer la puesta en marcha, el próximo 15 de octubre, del Foro Cívico y Constituyente, un proceso participativo con el que se “empezarán a sentar las bases para una Constitución” catalana y que dependerá del Govern. Torra hizo este anunció en la presentación del plan de Gobierno para un mandato que, explicó el president, aspira a que dure cuatro años. El Foro, sin embargo, no aparece en el texto oficial del programa de legislatura.

Torra aseguró que el plan de Gobierno es una “pieza más” en el camino a la hipotética república. “Hacer efectiva la república no es salir al balcón y decirlo, es también la acción del Govern”, dijo. Varias de las 1.000 acciones concretas recogidas en el documento se arrastran desde la primera legislatura de Artur Mas y nunca llegaron a aprobarse, como una ley catalana de Dependencia, la revisión del mapa de prestaciones sociales o la puesta en marcha de la T Mobilitat, la tarjeta con chip para el transporte público, entre otros. El presidentpidió un voto de confianza en que está vez si llegarán a buen puerto.

El plan también incluye otras iniciativas que implicarían negociaciones con el Gobierno y que en algunos casos pueden chocar con competencias estatales, como una nueva normativa de arrendamientos urbanos o poder volver a vender deuda en los mercados internacionales y poder así abandonar el Fondo de Liquidez Autonómica. Torra no ve ninguna paradoja en que se pida negociar y al mismo tiempo se comience un supuesto proceso constituyente, liderado desde el departamento de Presidencia. El líder catalán evitó dar más detalles sobre cómo funcionará este espacio de debate y cómo se refrendará. También quitó hierro a la posibilidad de que el Estado actúe en contra del foro: “No trabajamos pensando en si nos recurren o no. Si nos han dicho que quieren buscar una solución política entonces no nos pueden judicializar”, dijo.

El documento, que está organizado bajo cuatro grandes ejes, lo inspira un “cambio republicano”, según explicó Torra si bien en el texto no se usa en ningún momento la palabra república. Con todo, las medidas están en el aire, a la espera de que haya un acuerdo presupuestario en el Parlament. El president se mostró confiando en alcanzar un pacto con los comuns y la CUP para sacar adelante las cuentas y aclaró que que no espera nada del PSC. “No me propongo ahora mismo negociarlos con el partido socialista”, dijo. El documento no incluye ninguna subida de impuestos si bien Torra dejó la puerta abierta a algún tipo de negociación posterior.

El president también advirtió que si el Ejecutivo central no levanta los recursos pendientes sobre leyes sociales catalanas, que promovió el Gobierno de Mariano Rajoy y que se están debatiendo en la Comisión Bilateral Estado Generalitat, las volverá a llevar al Parlamet para su aprobación. “Es hora de que el Gobierno mueva ficha”, pidió Torra, que supeditó esos movimientos a la posibilidad de que los independentistas con representación en el Congreso apoyen las cuentas. “Tenemos la voluntad política de aprobar el contenido de las leyes suspendidas. Si el Gobierno lo hace o no [retirar los recursos] nosotros seguiremos con el objetivo”, dijo.