El Estado ofrece al Govern un edificio para acoger a menores ‘sin papeles’

El Gobierno central ha ofrecido a la Generalitat un céntrico edificio en Barcelona para acoger a menores extranjeros no acompañados (MENA). El aluvión de jóvenes que ha llegado a la capital catalana en los últimos meses ha desbordado al Govern, que se ha quedado sin plazas en sus centros para acogerlos. Muchos MENA han pasado varias noches durmiendo en las salas de espera de comisarías de los Mossos d’Esquadra. Según fuentes consultadas por EL PAÍS, el Gobierno ha respondido a una petición de ayuda del Govern ofreciendo un inmueble de 1.500 metros cuadrados en la Via Laietana que iba a ser subastado.

El embudo de menores no acompañados que hay en Cataluña se remonta al pasado otoño, cuando salió a la luz que muchos de estos jóvenes —que llegan a España procedentes, sobre todo, de Marruecos para trabajar— pasaban hasta tres días en dependencias de la Ciudad de la Justicia de Barcelona —un lugar no habilitado y que carecía de las condiciones básicas— hasta conseguir una plaza en un centro de acogida.

La Generalitat amplió los recursos disponibles para acoger a estos jóvenes pero la constante llegada de MENA durante el último año ha vuelto a poner a prueba el sistema de protección de menores. En tres años, los jóvenes extranjeros que llegaron solos a Cataluña se ha cuadruplicado (de 377 en 2015 a 1.949 en lo que va de año). De hecho, a finales de agosto, ya se había superado la cifra global de MENA registrados en todo el 2017.

La avalancha de menores no acompañados ha puesto en jaque a la Dirección General de Atención a la Infancia y a la Adolescencia (DGAIA), el órgano de la Generalitat encargado de su tutela. El Departamento de Asuntos Sociales admite que el sistema está “muy tensionado” y se han vuelto a producir situaciones que califican de “atípicas”. Por ejemplo, acoger a estos jóvenes en campings o, como ha ocurrido en los últimos días, mantenerlos en dependencias policiales de los Mossos d’Esquadra durante varias noches a la espera de una plaza libre en un centro habilitado.

Según fuentes consultadas por EL PAÍS, la Generalitat ha pedido ayuda al Gobierno central para solventar la falta de recursos asistenciales para atender a estos menores. El Ejecutivo de Pedro Sánchez ha respondido ofreciendo un edificio en la Via Laietana de Barcelona, en pleno centro de la capital catalana, para acoger a estos chavales. El inmueble, de 1.500 metros cuadrados, iba a ser subastado el próximo 10 de octubre. Fuentes consultadas aseguran que la delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera, ya ha solicitado que se pare la subasta.

La Generalitat no ha concretado si esta oferta está sobre la mesa. “Estamos en conversaciones”, se limitaron a apuntar fuentes de Asuntos Sociales. El inmueble está completamente habilitado y acondicionado para acoger a los jóvenes extranjeros de forma inmediata.

Si el Govern acepta la oferta, este inmueble se uniría al resto de recursos asistenciales de los que dispone la Generalitat para atender a menores inmigrantes que llegan a Cataluña sin referentes familiares que los acompañen. “En un año hemos creado más de 2.000 plazas de acogida en 100 centros”, reivindica una portavoz de Asuntos Sociales. El Govern defiende que está abriendo “un centro cada semana” con la premisa de que “ningún niño duerma en la calle”. “Poner en marcha un centro de acogida de forma ordinaria se tarda seis meses y nosotros lo estamos haciendo en cuestión de días”, explica esta portavoz. Cataluña dispone de 2.047 plazas. En agosto se abrieron 255, según la Generalitat.

A la espera de que la Generalitat decida si acepta la oferta del Gobierno central, el Departamento de Asuntos Sociales también ha querido zanjar la polémica suscitada a causa de los menores que han pasado las últimas noches durmiendo en la sala de espera de algunas comisarías. En una carta dirigida a los centros de acogida, la directora de la DGAIA, Georgina Oliva, avisó de que los menores que sean trasladados por los Mossos a sus centros “habrán de ser acogidos”.

Asuntos Sociales había pedido a los Mossos d’Esquadra que atendieran a los chavales mientras habilitaban nuevos espacios para acogerlos pero el cuerpo policial avisó ayer de que dejaría de cobijar menores en sus comisarías. “Equipos de Mossos d´Esquadra llevarán a cualquiera de los Centros que la Dirección general tiene en Cataluña, a las personas menores de edad que hayan sido identificadas en dependencias policiales para que sean atendidas. En estos momentos desconocemos los centros concretos donde los agentes policiales se desplazarán para llevar a estos jóvenes y por tanto, hacemos extensiva esta comunicación a todos”, explicó Oliva en la misiva.

El Síndic de Greuges, Rafael Ribó también había criticado esta práctica y reclamó a todas las administraciones que garanticen espacios para atender a los MENA ya que esta ocupación en las comisarías “afecta a la calidad de la acción protectora que se da en el resto de niños residentes tutelados por la Administración”, dijo.