Torra ante la prensa internacional: “Yo no tengo la posibilidad de abrir las cárceles”

Tras días de inconcreciones sobre cómo desacatar una posible sentencia condenatoria a los líderes independentistas procesados por rebelión y malversación, el presidente catalán, Quim Torra, descartó ayer lunes tajantemente la posibilidad de sacarlos de prisión unilateralmente. “No tengo la posibilidad de abrir las cárceles”, dijo en una rueda de prensa ante medios internacionales. El Govern defiende que denunciar lo que considera un juicio injusto es “acción de Govern” y cree que esta vez Europa sí prestará atención a sus reivindicaciones.

Los nueve líderes independentistas que están en prisión preventiva se encuentran en cárceles catalanas, y la Generalitat tiene la competencia sobre ellas. Por eso, ante las insistentes afirmaciones en los últimos días de Torra de que no aceptará una hipotética sentencia condenatoria, ha surgido la duda de si estaría dispuesto a desacatar el fallo abriendo las puertas de las celdas para que los presos salgan.

“Nuestro compromiso de respeto a nuestras propias instituciones y su dignidad incluye que renunciemos a abrir las prisiones. Es la justicia la que las tiene que abrir. La justicia tiene que recuperar su dignidad y tomar las decisiones adecuadas”, dijo Maragall. Torra se ha limitado a rechazar esa opción y ha recordado su idea, aún sin concretar, de que no aceptará una sentencia condenatoria. “Hay una contradicción evidente en que se juzgue a un Gobierno cuando su presidente está libre en Waterloo y se puede mover libre por Europa”, dijo Torra en referencia a Carles Puigdemont, que no podrá ser juzgado mientras siga fugado en Bélgica. Un tribunal territorial alemán denegó en julio su entrega a España por rebelión, al no apreciar la existencia de ese delito.

El president también explicó que la reivindicación de la situación de los políticos presos y huidos de la justicia forma parte de su acción de Govern. “Hemos gobernado desde el primer momento que nos dejaron, después de no permitir que personas con sus derechos políticos intactos pudieran asumir sus cargos. Denunciar las irregularidades de este proceso, mis visitas a las cárceles, denunciar los efectos de la aplicación del artículo 155 de la Constitución es acción de Govern”, dijo Torra.

Torra también intentó quitar hierro a la división de criterio entre Junts per Catalunya y Esquerra en cómo hacer efectiva la república. El president puso en valor el triunfo electoral en las pasadas elecciones –“eso significa algo”, ha dicho- y pese a que ha reconocido los diferentes matices ha asegurado que “todos estamos unidos por la idea de la república y eso es lo importante”. “Además, no es solo un tema de partidos, sino de la gente”, apostilló.

Maragall, finalmente, aseguró que esta vez el independentismo cuenta con una respuesta más benévola a su causa por parte de Europa. “La libertad y la democracia son las causas de Cataluña y son las causas de Europa”, dijo el consejero. Para Maragall “no se produjo el grado de compromiso europeo que debería producirse. El sistema de valores que representa Europa es de reacción lenta”.

De ahí, que para ganar el apoyo europeo en esta ocasión, el Govern plantea “gestionar más el tiempo” y lograr “más verificación democrática” a través de las próximas citas electorales (como las municipales) que Maragall cree que serán leídas en como una manera de revalidar la mayoría independentista. Esto, consideró, aumentará el apoyo europeo. Por la tarde, en la manifestación de la ANC, dijo: “Necesitamos que la sociedad catalana sea consciente del sacrificio que necesitaremos [para alcanzar la república]”.