Pitos y plásticos negros contra la mujer en el Alarde de Hondarribia
Cientos de personas reciben con silbatos y muestras de rechazo a la compañía mixta que defiende la participación femenina en la fiesta
Las mujeres que han participado este sábado en el Alarde de Hondarribia (Gipuzkoa) han vuelto a ser increpadas, insultadas y recibidas con pitos y muestras de rechazo. La escena, con más o menos intensidad, se viene repitiendo cada año durante las dos últimas décadas, desde que un grupo de mujeres decidió acabar con la discriminación que históricamente se daba en esta fiesta. La compañía mixta Jaizkibel, que a finales de los 90 abanderó la presencia femenina en pie de igualdad con los hombres en una fiesta que impedía a las féminas desfilar como soldados, ha celebrado su alarde, pero con en un ambiente de mucha crispación, con una fuerte presencia policial, aunque finalmente la Ertzaintza no tuvo que intervenir.
Los integrantes de Jaizkibel, unos 600 hombres y mujeres en total, marcharon por las calles de Hondarribia mientras una mayoría del pueblo, como viene sucediendo los últimos años, les hizo un pasillo, formando un muro de plásticos negros y pancartas a favor del alarde tradicional (solo los hombres desfilan como soldados).
Cientos de personas, mayoritariamente mujeres contrarias a la participación femenina en la fiesta, colocadas de espaldas en los márgenes de todo el recorrido han hecho sonar silbatos con estruendo al paso de la compañía mixta. También han exhibido carteles con el lema Alarde tradicional en euskera (Betiko Alardea).
Ante el clima de tensión que se estaba viviendo, agentes de la Ertzaintza han decidido escoltar a las mujeres de Jaizkibel y, en varios momentos, han hecho uso del megáfono para solicitar calma a los presentes. Finalmente, aquellas han podido completar el recorrido hasta la plaza de Armas y posteriormente continuar el desfile por las calles de Hondarribia.
La compañía mixta ha vuelto a contar con el respaldo de representantes institucionales y de los partidos políticos, como la presidenta de las Juntas Generales [Parlamento provincial] de Gipuzkoa, Eider Mendoza, del PNV. La directora de Emakunde (Instituto Vasco de la Mujer), Izaskun Landaida; la adjunta del Ararteko, Julia Fernández; el teniente de diputado general de Gipuzkoa, el socialista Denis Itxaso; la portavoz parlamentaria de EH Bildu, Maddalen Iriarte, así como miembros de Podemos Euskadi y Ezker Anitza-IU, han estado presentes en esta fiesta para mostrar su apoyo a Jaizkibel.
Esta semana, Denis Itxaso, número dos de la Diputación guipuzcoana, había hecho un llamamiento para que el público hondarribitarra no mostrara pancartas y plásticos negros al paso de las mujeres, porque estos comportamientos suponen "una agresión", dijo, que persigue "invisibilizar" la voluntad de participación femenina en igualdad con los hombres. Pero su petición no ha sido atendida por una parte mayoritaria de la ciudadanía.
Cuando la compañía Jaizkibel ha concluido su desfile y abandonado la Parte Vieja de la localidad, el público ha retirado las pancartas y plásticos negros y se ha mantenido en las aceras hasta que, unos minutos después, ha arrancado el Alarde de Hondarribia, en el que desfilan cerca de 5.000 personas en 20 compañías, cada una con su cantinera, para cumplir el voto a la Virgen de Guadalupe por su ayuda en el sitio de las tropas francesas a la ciudad en 1638.
El pasado 30 de junio se celebró un alarde similar en Irún, la localidad vecina, donde ya viene celebrándose el desfile mixto desde 1998. En este caso, la fiesta discurrió con normalidad, sin incidentes, ni las muestras de rechazo como las vividas hoy en Hondarribia
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