Lazos de colores para otras causas “olvidadas”

Frente a los lazos amarillos que piden la libertad para los políticos catalanes presos, lazos de otros colores: rosa, azul, gris, negro o rosa. “Para recordar a los refugiados que mueren en el Mediterráneo, los recortes en la educación, las colas en la sanidad, la violencia de género, la lucha contra el cáncer, el tema animalista”.

Con este objetivo, el colectivo "de izquierdas y librepensadores" Un dels nostres ha querido reivindicar con un “acto simbólico” durante el que han colgado lazos de colores, “todo lo que el debate de los nacionalismos está olvidando”, en palabras de su presidente y fundador, Joan Estrada.

“No vamos a dedicarnos a ir a colgar lazos por los puentes de la autopista ni en La Bisbal d'Empordà [donde hace unos días un grupo de personas con la cara tapada retiró de noche los lazos colgados en la población], pero con el lema #totselscolors, en homenaje a la canción de Raimon, queremos decir que estamos hartos de banderas, himnos, nacionalismos y del y tú más”, ha afirmado Estrada.

Para colgar los lazos, cinco integrantes del grupo que cada año otorga el premio Christa Leem, han elegido dos puntos que entienden que son simbólicos. El primero, el centro cultural del Born “del que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, dijo que es el epicentro del independentismo”. Y el segundo, la valla del parque de la Ciutadella, donde durante una concentración convocada por Ciudadanos para protestar por la agresión a una mujer que retiraba lazos amarillos resultó agredido un cámara de Telemadrid al ser confundido con otro de TV3.