Los desfiles en la playa inauguran la 080

Parecía que el verano no iba a llegar este año, pero tras meses de frío meteorológico y político las playas retoman su actividad y Cataluña vuelve a tener Gobierno. A diferencia de la anterior 080 Barcelona Fashion, la actual coyuntura política ha permitido que esta vez sí se celebre la inauguración institucional. La 22ª edición ha dado el pistoletazo de salida en la playa de la Barceloneta con la 080 Barcelona Fashion Beach, “una iniciativa nueva que quiere poner en valor la moda de baño, muy potente en Cataluña”, ha explicado el director del evento, Miquel Rodríguez. El desfile de la firma de baño Como un pez en el agua abrió el salón con una fiesta en la playa. La pasarela se transforma en una discoteca al ritmo techno de los volantes en la hombrera, de hip hop con estampados graffiteros o de heavy metal a través de las tachuelas. La esencia festivalera que han dejado el Primavera Sound o el Sónar tiene continuidad en los colores chillones del pelo de las modelos, que con una bisuteria poco discreta demuestran que los trajes de baño también están hechos para la noche.

La jornada continuó en esta privilegiada y nueva ubicación, situada en el Club Patí Vela, con la colección de Guillermina Baeza. La consolidada diseñadora presentó su nueva colección Harmony, creativity, elegance'dedicada a una mujer deportista y amante del arte. Los colores de las prendas se fusionan con el entorno: las tonalidades azules del mar y los rojizos del atardecer visten la pasarela con la elegancia y la sofisticación características de la firma. El binomio infalible del blanco y el negro culminan los últimos looks en un juego de opuestos que pretende realzar la silueta femenina. A los trajes de baño se le suman otras piezas de vestir en tejidos metalizados a juego con las sandalias de tacón. Otra de las tendencias que recoge Baeza es el uso del plástico transparente en los complementos, presentes en viseras, bolsos y brazaletes.

Tras las vistas al mar, vuelta al ya habitual Recinto Modernista de Sant Pau, donde tendrán lugar el resto de desfiles, un total de 28, hasta que termine la semana de la moda el viernes. La consejera de Empresa y Conocimiento, Àngels Chacón, hizo en la inauguración oficial un “llamamiento a la concienciacion de todos los consumidores respecto a priorizar el consumo de articulos sostenibles y locales” y consideró que esta edición “tiene muchos diseñadores y expositores acordes con estos principios”.

El protagonismo de la moda de baño no cesó con el cambio de recinto y reapareció para cerrar la primera jornada con el esperado retorno de la emblemática firma TCN, que encara una nueva etapa bajo la dirección creativa de Asier Tapia. Su colección de lencería y baño combina tradición y modernidad con diseños para una mujer mediterránea, urbana y contemporánea. El tema de su nueva colección es el eterno verano, época de romanticismo y libertad. El cine es el principal referente estético en películas como Vírgenes suicidas, Heartstone o Picnic en Hanging Rock. La pureza del blanco, las transparencias y los tejidos vaporosos recogen la paz y el intimismo de esa época mágica con la que la renovada marca quiere conquistar a una mujer actual y femenina.

El diseñador de moda masculina Miquel Suay repite en la pasarela barcelonesa, esta vez con una colección dedicada al arte . La inspiración le viene del pintor surrealista Jean Dubuffet, cuyos dibujos aparecen en muchas de las piezas de ropa. Los modelos desfilaron en pareja, junto a una compañera femenina, vistiendo conjuntos idénticos, lo que no niega la esencia masculina de la marca, sino que amplia lo que no de deja de ser un estilo a la mujer.