El PP gallego aprueba en solitario su reforma sanitaria pese a las protestas

El proyecto que reforma la ley de salud de Galicia de 2008 y que reduce de 11 a siete las áreas sanitarias ha recibido la aprobación definitiva en el Parlamento gallego solo con los votos del PP, quien ha defendido, a través del diputado Aurelio Núñez Centeno, que la norma "mejora la calidad" de la sanidad pública. Enfrente, En Marea, PSdeG y BNG han rechazado de plano una norma que "reduce y aleja" los servicios de los ciudadanos, además de "perjudicar la igualdad de oportunidades". Toda la oposición ha recordado las movilizaciones sociales contra la ley, incluida la multitudinaria manifestación de Santiago, y han avanzado que, aunque los populares la hayan sacado adelante, las críticas no cesarán.

Más información

Multitudinaria protesta en Santiago contra la reforma sanitaria de Feijóo

Feijóo mantiene su reforma sanitaria pese a la masiva protesta

"Podrán aprobarla con su mayoría, pero no cuenten nunca con desmantelar el sistema y que nos quedemos callados", ha proclamado el parlamentario socialista Julio Torrado, en la misma línea que se pronunciaron Eva Solla (En Marea) y Montse Prado (BNG). El debate se produjo con la tribuna llena y el líder del PSdeG, Gonzalo Caballero, entre el público.

También se desplazaron a Santiago el presidente de la Diputación de Lugo, el socialista Darío Campos, y alcaldes de municipios próximos a hospitales comarcales, entre ellos el regidor socialista de O Barco y presidente de la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp), Alfredo García, para seguir el debate en el hemiciclo, donde también se encontraba, en la bancada del Gobierno, el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña.

Entre tanto, fuera del Pazo do Hórreo, numerosas personas han secundado una concentración convocada por SOS Sanidade Pública, que ha insistido en la retirada de una norma que sus portavoces ven "un atraso" y "un paso más hacia la privatización". "Cuanto más deterioran la sanidad pública, más benefician a la privada", han acusado a los populares.

Con esta percepción han coincidido los distintos diputados de la oposición que intervinieron en un debate en el que la diputada de En Marea Eva Solla ha recordado que "fuera" de la Cámara había "muchos gallegos recordando que la tiranía no debe ser ley", gente "que no es tonta ni está manipulada" pero sí conoce la situación de la sanidad gallega. Por ello, tras incidir en que la norma "reduce servicios" y denunciar que los profesionales sanitarios "trabajan con la lengua fuera" mientras la "inequidad campa a sus anchas", Solla ha lamentado que el Gobierno de Feijóo haya hecho "oídos sordos" a las protestas sin atender las peticiones de reunión de los colectivos en defensa de la sanidad pública.

"No gobiernan en mayoría, gobiernan en satrapía", ha afeado, antes de incidir en que la "contrarreforma" sanitaria que este martes vio luz verde en la Cámara autonómica gracias al apoyo del PPdeG "camina también contra la participación en el diseño de las políticas de la salud".

También el parlamentario del PSdeG Julio Torrado ha criticado que la ley "reduce y aleja los servicios sanitarios de los ciudadanos" y ha incidido en la movilización social, antes de remarcar que "la ciudadanía no se manifiesta porque le paguen bocadillos", sino porque le "preocupa" la situación de la sanidad pública. "Podrán aprobar esta ley con su mayoría, pero no cuenten nunca con desmantelar este sistema y que nos quedemos callados", ha sentenciado el diputado, quien ha recordado que los socialistas proponían "un catálogo de servicios que pueda igualar a la ciudadanía" y al que los populares "dijeron que no desde el primer minuto". "Ese es su parlamentarismo", ha lamentado.

La nacionalista Montse Prado ha advertido que la votación de este martes "no es un punto y final", ya que el pueblo gallego "está dispuesto a defender la sanidad pública a pesar" de los populares. "Ganan la votación, pero han perdido la batalla", ha advertido. Al igual que el resto de portavoces de la oposición, ha censurado que el PP "ni escuche ni dialogue" y ha lamentado que los populares promuevan "una dictadura disfrazada de democracia".

Ausencia del presidente de la Xunta

El popular Aurelio Núñez Centeno ha censurado este tipo de afirmaciones y, tras defender la norma, ha pedido a los alcaldes y a los ciudadanos "tranquilidad y tiempo para el desarrollo" de la norma. Al término del debate, en el que no estuvo Feijóo, quien acompañó al ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, en un acto de colocación de primera piedra en obras de la A-54 Lugo-Santiago, tanto el diputado popular como parlamentarios del resto de partidos han subido hasta la entrada del hemiciclo a saludar a los invitados.

También lo hizo el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, quien ha defendido que se legisla "para mejorar" las condiciones del sistema sanitario gallego, que ha definido como "uno de los mejores" no solo en el ámbito de España, sino también de Europa. "No podemos quedarnos quietos, hay que ir mejorando. Tratamos de llegar y dar información a todo el mundo, pero a veces nos falta esa parte, que se entienda", ha reconocido el conselleiro, quien ha concluido que "lo más importante" es continuar desarrollando esta norma "para que la población la conozca perfectamente".

Entre tanto, durante todo el debate, decenas de personas convocadas por SOS Sanidade Pública protestaron con pancartas y consignas demandando la retirada de la reforma sanitaria. "Feijóo, fariña, non volvas á Mariña", entre otros cánticos, acompañaron a pitidos y al sonido de un bombo que podía oírse desde dentro del Pazo do Hórreo.