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El Mercado de Fuencarral será un Decathlon

El espacio, que cesó su actividad en 2015 después de 17 años en el barrio, ha sido adquirido por 50 millones de euros por el fondo AWE Europe que se lo ha alquilado a la empresa francesa

Estado actual del antiguo Mercado de Fuencarral, que se convertirá en una tienda de Decathlon.Foto: atlas | Vídeo: KIKE PARA | ATLAS
Pablo León

Dos años después de su cierre, el Mercado de Fuencarral, clausurado todo este tiempo, se va a convertir en un Decathlon. La operación inmobiliaria —una compraventa por valor de 50 millones de euros realizada entre dos fondos de inversión, el propietario AGS y el comprador AWE Europe— acaba con el espacio alquilado a la empresa francesa dedicada al mundo deportivo. En 2015, el anterior dueño Ramón Matoses vendió el local. Aunque ninguna de las partes confirmó la cuantía de la venta, fuentes del sector inmobiliario la tasaron en unos 22 millones de euros.

Aunque las puertas Mercado de Fuencarral han estado cerradas más de dos años, parece que van a volver a abrir. No será en forma de centro comercial underground y alternativo sino como un Decathlon. El icono de Chueca y Malasaña cesó su actividad en 2015, después de 17 años en el barrio y tras su venta al fondo de inversión ASG. Este fondo, “especializado en proyectos inmobiliarios complejos y de valor añadido”, ha anunciado que ha vendido el local, de 2.400 metros cuadrados, a AWE Europe por 50 millones de euros. A su vez, esta firma alquilará el inmueble a la empresa francesa dedicada al deporte.

En julio de 2015 cerró el Mercado de Fuencarral. “Este lugar ha sido emblemático”, contaba entonces a EL PAÍS Ramón Matoses, propietario del local. Hablaba días después de vender el local a un fondo de inversiones. Aunque la cifra no trascendió, de manera oficiosa se habló de 22 millones de euros.

No era la primera vez que el cierre amenazaba a este local; en 2011 también sonaron trompetas de cese de actividad que quedaron en nada. Esta vez fue real. “Desde que nos instalamos aquí ha habido rumores de que esto lo iba a comprar Zara”, ironizaba, al enterarse de la noticia, Isabel Moreno, propietaria de Gi Jane, comercio dedicado a la venta de ropa militar femenina y que fue uno de los que aguantaron hasta el final del Mercado. 

Cuando el Mercado de Fuencarral inauguró en 1998 entre Chueca y Malasaña, el centro de Madrid tenía otro aspecto. Los coches circulaban por la estrecha avenida y sus aceras aún destilaban prostitución y drogadicción. “Era una zona muy especial de Madrid, algo degradada y que requería de alguna acción para cambiarla”, recordaba Matoses los orígenes de “su criatura”. Tras criarla y mimarla, cuando decidió venderla, 17 años después, Malasaña y Chueca se habían convertido en un hervidero de moderneo y de actividad; el Mercado, en un icono. Y la calle Fuencarral, en una high street, según la consultora inmobiliaria CBRE.

En resumen, la calle se había gentrificado y convertido en una zona de alto interés. Así ha quedado demostrado con la operación de compraventa por 50 millones de euros y el casi instantáneo alquiler a la francesa Decathlon. Antes se rumoreó que tenían interés en el espacio Inditex, Topshop o Uniqlo, firma japonesa dedicada a la moda.

“Esta es una operación típica en la que trabajamos desde ASG: invertimos en un activo particular y diferente —en este caso muy escaso en la zona por su tamaño— al que podemos añadir valor a través de su renovación, reposicionamiento y búsqueda de un inquilino de primer nivel a largo plazo", explica Brian Betel, socio director de ASG Iberia Advisors en un comunicado. La reconversión del espacio la ha realizado ASG, en colaboración con Talus Real Estate.

El inquilino de larga duración es Decathlon España, que cerró 2016 con unas ventas de 1.639 millones de euros, un 3,94% más que el ejercicio anterior (1.577 millones de euros). Ese crecimiento se ha producido gracias, en parte, a las filiales tiendas urbanas Decathlon City, que inauguró 12 nuevos puntos de venta en Madrid, Cáceres, Palma Mallorca, Barcelona, Gijón, Zaragoza, Málaga, Ronda, Ourense, Cádiz y Vigo.

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Sobre la firma

Pablo León
Periodista de EL PAÍS desde 2009. Actualmente en Internacional. Durante seis años fue redactor de Madrid, cubriendo política municipal. Antes estuvo en secciones como Reportajes, El País Semanal, El Viajero o Tentaciones. Es licenciado en Ciencias Ambientales y Máster de Periodismo UAM-EL PAÍS. Vive en Madrid y es experto en movilidad sostenible.

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