Colau enfría su disposición a colaborar con el referéndum independentista
El Gobierno municipal rechaza votar una proposición del PDeCAT que pedía la cesión de locales para la votación
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, enfría su disposición a colaborar con el referéndum. El lunes pasado, Colau aseguró que Barcelona está comprometida con el “derecho a decidir” y que el 1 de octubre “pondrá todas las facilidades para que esta movilización se produzca con el máximo éxito posible, como ha hecho siempre, en las Diadas o el 9-N”. Pero su gobierno ha decidido esta semana votar en contra de una proposición del PDeCAT que pedía explícitamente al gobierno que ceda locales para votar.
Lo ha revelado esta mañana el ex alcalde Xavier Trias, que ha asegurado que ha retirado la proposición del orden del día tras comunicarle el alcalde accidental, Gerardo Pisarello, que iban a votar en contra. A juicio de Trias Barcelona debe sentirse vinculada estrechamente con el referéndum y "no se puede permitir votar en contra de esta propuesta". "Les pido que reflexionen, hablen con la Generalitat y busquen la manera de sentirse involucrados en este referéndum", ha dicho.
El Gobierno de Colau mantiene que la postura no ha cambiado. Y que ha decidido votar "no" a cualquier proposición que se presente en el plenario y esté vinculada con el referéndum previsto para el 1-O. El argumento es, según fuentes del ejecutivo, "evitar que los grupos de la oposición instrumentalicen la institución sobre una convocatoria que ni está oficialmente convocada y sobre la que el Ayuntamiento no ha recibido ningún requerimiento". Las mismas fuentes señalan que el partido de Colau, Barcelona en comú, también votará en contra de una proposición del PP y Ciutadans que pide justo lo contrario que el PDeCAT: que Colau no permita hacer el referéndum.
La revelación del no de Colau a la propuesta de apoyar la apertura de colegios electorales llega el mismo día en que Miquel Iceta, primer secretario de los socialistas catalanes, había advertido a la alcaldesa de que los socialistas no podrán seguir respaldando al gobierno municipal en el caso de que el Ayuntamiento acabe apoyando el referéndum del 1 de octubre. Colau gobierna con sus once concejales y los cuatro del PSC, liderados por Jaume Collboni.
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