Parques, piscinas y cintas de vídeo
El director de cine busca inspiración por las zonas verdes de Madrid, cierra negocios en Huertas y rebusca entre montañas de películas en Vallecas
1. Restaurante Ana La Santa. Aquí he firmado muchos contratos con colaboradores para mis proyectos.Tiene un menú del día muy mimado, con comida casera y sin exceso de platos; me gustan los sitios con menús cortos. Es, además, fácilmente accesible, algo imprescindible para mí. Hay lugares en Madrid que serán maravillosos pero que no conozco porque no tienen rampa de acceso. (Plaza de Santa Ana, 14).
2. Parque de Enrique Tierno Galván. Está cerca de mi casa y lo he utilizado como plató. Me gustan los lugares que me inspiran historias y este es uno de ellos. Allí rodé Los gritones, corto que ha dado la vuelta al mundo y se ha llevado más de 40 premios. Es un parque ecléctico. Hay incluso un trozo de vía de tren que te lleva al museo del ferrocarril. (Arganzuela).
3. Import Vídeo Vallecas. Es un almacén al que van a parar los stocks de los videoclubs que cierran. Este lugar, genuino y regentado por un señor mayor, está lleno de torres de dvd y cintas de vídeo. El lugar perfecto para perderte durante horas buscando cosas descatalogadas o míticas películas ochenteras. (Carlos Martín Álvarez, 1).
4. Plaza del Conde de Barajas. Es un oasis de silencio en pleno Madrid, cerca de la Plaza Mayor. Allí estaba Cinearte, un sitio de posproducción de sonido, donde monté mi primera película Seis puntos sobre Emma. Allí se han hecho las mezclas de sonido de todas las películas de Almodóvar.
5. Home. Entré con mis amigos un día tan solo porque nos gustaba el nombre. “Si se llama así será bueno”, pensamos. Y sí: los arroces están ricos, el encargado es muy majo y el precio, perfecto. No cocino nada asi que como mucho fuera, pero intento que sea sano. En este sitio siento como si comieras algo preparado por mi madre, que es algo que echo mucho de menos. (Ibiza, 41).
6. Filmoteca Nacional. Soy canario y nunca había tenido la oportunidad de acudir a una filmoteca que te permitiera ver clásicos en 35 milímetros, como E.T. que me marcó. Suelo ir una vez al mes. A veces cito a actores en la cafetería. (Magdalena, 10)
7. La Fugitiva. Es una librería café de Atocha muy tranquila: la gente se comunica mediante susurros. Es un lugar genial para antes o después de ir a la Filmoteca. Se toma buen café y te lo sirven en tazas como las de tu casa; cada una diferente. (Santa Isabel, 7).
8. Polideportivo Daoíz y Velarde. Necesio nadar a menudo y esta piscina climatizada es la más cercana. Me gusta porque no suele estar atestada de gente y es muy bonita. Aquí rodé parte del corto Manguitos. (Avenida de la Ciudad de Barcelona, 162).
9. La tienda de Caixaforum. Una de las cosas más guays a la hora de dar un regalo, es que quien lo recibe no sepa dónde lo has comprado. Y con los productos de esta tienda lo consigues. Una vez compré un pinta y colorea de Lady Gaga y el libro de Yumi Sakugawa I Think I Am in Friend-Love With You (Creo que siento amor-amistad por ti), una reflexión ilustrada sobre los vínculos inclasificables y confusos entre ser amigos y estar enamorados. (Paseo del Prado, 36).
10. Renoir Princesa Plaza de España. El sitio ideal para ver cine en versión original. Tiene 11 salas y siempre están todos los estrenos. Yo tengo que entrar por la puerta de emergencia que está llena de pis de la gente que sale de fiesta, pero me da igual. Mi primera película aguantó allí dos meses y medio en cartelera. (Princesa, 3).
Multitudinaria orgía
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