Un refugio de la Guerra Civil desafía el derribo del Taller de Artillería

El proyecto para derribar el Taller de Artillería (construido en 1899 y muy próximo al complejo de AZCA) y convertirlo en una urbanización de viviendas de ocho alturas con piscina y zonas verdes se ha encontrado con un obstáculo subterráneo imprevisto. Un informe realizado por investigadores de la asociación Madrid, Ciudadanía y Patrimonio aporta documentos para tratar de demostrar que bajo el edificio central se encuentra un refugio antiaéreo construido en 1938, en plena Guerra Civil española.

En concreto, un expediente de la Oficina Técnica de la Comandancia General de Ingenieros del Ejército, fechado en febrero de 1938, detalla “las obras que se estaban acometiendo para fortificar el Taller de Precisión”, entre las que se incluyen la edificación de un polvorín, que sigue en pie convertido en trastero. La Memoria de los trabajos realizados en la construcción de refugios durante el año 1938, por su parte, cita “un refugio situado en la calle de Modesto Lafuente”, otro de los accesos del edificio. También aparece en un expediente del Ayuntamiento franquista de 1939.

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Además, la asociación para la protección del patrimonio ha hallado el plano original del refugio anteaéreo, que cumple con todas las características de este tipo de instalaciones: tiene galerías hechas con bóveda de ladrillo, con dos entradas alejadas por si hay un derrumbe, escalera en recodo para que no entre ni metralla ni onda expansiva y galerías entrecruzadas para alojar el mayor número posible de personas.

El hallazgo es importante porque, si se confirma, pasaría a tener la categoría de Bien de Interés Patrimonial; es decir, una protección que impediría su derribo. No es la primera vez que ocurre.

En julio, un recurso de Ecologistas en Acción ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid y una denuncia de una particular ante la Fiscalía de Medio Ambiente lograron paralizar el proyecto. En agosto, los técnicos de la Comunidad de Madrid concluyeron que no se trataba de un refugio y que el edificio no merecía protección. “Los técnicos de la Comunidad llegaron a una conclusión según los documentos que había en ese momento. Cuando se presente este informe, tendremos que estudiarlo en profundidad”, dice Paloma Sobrini, directora general de Patrimonio del Gobierno regional.

Desde el Área de Desarrollo Urbano Sostenible del Ayuntamiento de Madrid, por su parte, explican que “en el momento en el que la comisión de patrimonio decide que no hay nada susceptible de ser protegido, tenemos que seguir adelante con el trámite del proyecto. No podemos decir no arbitrariamente”. Así que, mientras no se cambie la protección, “el proceso sigue adelante”.

Mientras, Ecologistas en Acción pide al Gobierno municipal “que paralice el procedimiento de demolición y estudie la protección tanto del refugio como del edificio”. Desde la cooperativa Residencial Maravillas, que impulsa las viviendas, declinan valorar el informe hasta que no lo reciban y señalan que en estos momentos se encuentra en negociaciones con el Consistorio para continuar con el proyecto. “Hay buena disposición por parte del Ayuntamiento”, explican.

Los trámites se iniciaron en 2014, cuando el Ministerio de Defensa vendió el Taller de Artillería a una cooperativa, Residencial Maravillas (integrada en Domo Gestora) por 111 millones de euros. El proyecto contempla levantar 355 viviendas en una urbanización de hasta ocho plantas de altura y a un precio de unos 3.300 euros por metro cuadrado.