Puigdemont dice que ninguna legalidad frenará la voluntad de los catalanes

El homenaje al expresidente de la Generalitat, Lluís Companys, fusilado tal día como ayer hace 76 años por las tropas franquistas, le sirvió ayer de escenario al actual presidente, Carles Puigdemont, para poner en tela de juicio la legalidad empleada contra el proceso catalán y lanzar una advertencia. “No habrá tribunales ni legalidades que vayan en contra de la voluntad del pueblo catalán si ésta es clara y manifiesta”.

Puigdemont denunció que Companys fue juzgado y condenado “por una legalidad injusta” y añadió: “Ninguno de los vestigios de esa legalidad que cuestionamos impedirá que el pueblo de Cataluña pueda conseguir las cuotas de libertad que nos propongamos”.

Pero no fue Puigdemont el único que cuestionó el proceder del gobierno estatal con la situación política catalana. El expresidente Artur Mas comparó el PP con el franquismo por juzgar “a gente demócrata y pacífica por haber escuchado al pueblo”. Durante la tradicional marcha de las antorchas en el Fossar de Santa Eulàlia en el castillo de Montjuïc, donde fue fusilado Companys, Mas aseguró que la “judicialización” del proceso soberanista —el TSJC decidió procesarlo a él y a las exconsejeras Irene Rigau y Joana Ortega por la consulta del 9N— demuestra que “la sombra del franquismo es muy larga”.

Más moderados pero también críticos con el gobierno central se mostraron ayer las otras formaciones políticas que participaron en la ofrenda floral en el Fossar de la Pedrera del cementerio de Montjuïc (allí se ubica el panteón que guarda la tumba del expresidente) para homenajear a Companys en el 76º aniversario de su fusilamiento. “Ni las vías unilaterales ni la judicialización son una solución”, apuntó la diputada socialista, Assumpta Escarp. La también coordinadora general del PSC defendió que “la política y el diálogo es lo que ha de preceder la actuación de todos los gobiernos” y aseguró que, precisamente por el inmovilismo del gobierno central y la falta de diálogo con el Ejecutivo catalán, el PSC “mantendrá el no a Rajoy” en una eventual investidura.

El líder de Catalunya Sí que Es Pot, Lluís Rabell, reivindicó la necesidad de un referéndum para solucionar el encaje de Cataluña en España, especialmente después de que el gobierno central instase el viernes al Tribunal Constitucional a actuar contra las resoluciones aprobadas en el Parlament. “El gobierno en funciones sigue en una vía, la de la judicialización, que no nos lleva a ninguna parte. Será un camino difícil, largo y complicado, pero hay un anhelo en la sociedad catalana y el referéndum será la salida a la situación de Cataluña”, indicó.

Por otra parte, mientras que el vicepresidente de la Generalitat y líder de ERC, Oriol Junqueras, se centró en ensalzar la figura de Companys, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, exigió que el Estado pida perdón por el fusilamiento de Companys —es el único presidente de Europa elegido democráticamente que ha sido fusilado— y que se anule el juicio sumarísimo al que fue sometido y que lo condenó a muerte. En esa misma línea se manifestó el portavoz de En Comú Podem en el Congreso, Xavier Domènech, que exigió al Estado que pida perdón por el fusilamiento de Companys. Forcadell anunció que la semana que viene se presentarán dos propuestas de resolución para abordar esta cuestión.