El Síndic ve “déficits” en la detección y atención de abusos a menores

El Síndic de Greuges, Rafael Ribó, ha alertado este lunes en el Parlament de "graves déficits" en la actuación de las administraciones y el centro educativo en el caso de abusos sexuales en los Maristas en Barcelona, que ha detectado al analizar los informes que las instituciones le facilitaron en respuesta a su informe.

Ribó ha calificado de inadmisible que se diga que los protocolos de 2006 no servían, cuando podrían haberse aplicado universalmente en cualquier ámbito de la sociedad en el que hay un abuso a un menor, y ha criticado las respuestas evasivas y "radicalmente desmentibles" de las Administraciones, como el supuesto falso de que no se aplica el protocolo en centros concertados. Y ha lamentado que no se haya creado un servicio especializado en abusos, a pesar de estar contemplado en la Ley de 2010 de los derechos y oportunidades en la infancia y la adolescencia.

Ribó también ha reprochado, indignado, que el inspector del departamento de Enseñanza que informó del caso de abusos sexuales en el colegio de los Maristas se preocupase más de defender el concierto educativo que de los derechos del alumno afectado. "En ningún momento el inspector (en su informe) se cuestiona porqué no se le informó del caso" de abusos sexuales que sufrió un alumno en 2011 en el colegio de los Maristas de Sants, destapado por el padre del mismo públicamente en febrero de este año 2016. Por el contrario, el inspector hace una defensa más importante del concierto que de los derechos del alumno víctima del abuso, una postura que le "subleva", ha reconocido hoy Ribó durante su comparecencia en la comisión del Síndic del Parlament de Cataluña.

El Síndic también ha deplorado que, en ese caso, la máxima autoridad de los Mossos d'Esquadra que acudió a una reunión convocada por el Síndic para averiguar qué había sucedido se conformara con indicar que "ya habían hecho lo que decía el juez", sin notificar el caso "al núcleo de protección de los menores" de Cataluña.

El tono contundente de Ribó sólo se ha suavizado hacia el final de su intervención, pero para reprochar a los diputados que aprobaran el pasado día 3 de marzo una moción en contra de los abusos, con medidas "que ya existían". El Síndic ha pedido que se escuche a los menores y a los jóvenes, para que puedan comunicar si sufren abusos de cualquier tipo.