La Comunidad paraliza el complejo hípico que proyectó en suelo protegido de Aranjuez
El Gobierno regional emite una declaración de impacto ambiental negativa sobre el proyecto tras cuatro años de tramitación
La posibilidad de albergar un complejo hípico y hotelero se aleja de Aranjuez. La dirección general de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid ha paralizado su construcción tras emitir, el pasado 6 de abril, una declaración de impacto ambiental (DIA) negativa sobre un plan que el propio Gobierno regional proyectó en 2011 en la Dehesa de Sotomayor, un paraje protegido de 635 hectáreas situado en la vega del río Tajo. El terreno pertenece a la propia Comunidad y está declarado Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA) y Lugar de Interés Comunitario (LIC). Además, está incluido en la Red Natura 2000. El 21 de abril, el Ayuntamiento de Aranjuez aprobó, por unanimidad, instar al Ejecutivo regional a resolver el contrato de explotación que mantiene con la UTE Ocio Sotomayor, pero de momento la administración autonómica no se ha pronunciado.
“Una vez vista la Declaración de Impacto Ambiental y comprobada su inviabilidad, lo mejor es confeccionar un nuevo proyecto sostenible", ha explicado el primer teniente de alcalde y concejal de Urbanismo en Aranjuez, David Estrada (PSOE). El edil ha recordado que el Gobierno regional ya rechazó en 2013 la declaración de Sotomayor como zona BIC alegando que estaba catalogada como BIP (Bien de Interés Patrimonial). Sin embargo, considera que es "fundamental" la declaración de zona BIC porque "es indispensable para que la Unesco pueda ampliar, en el futuro, el perímetro declarado Paisaje Cultural Patrimonio de la Humanidad".
Estrada ha destacado que "este atentado medioambiental" cuenta también con informes de la Confederación Hidrográfica del Tajo que desaconsejan su construcción. La idea original planteaba la edificación de 82.844 metros cuadrados y una ocupación de instalaciones de otros 400.000, en los que se incluían aparcamientos con capacidad para 1.500 vehículos y la construcción de 96 apartamentos de lujo. El concejal denuncia que en La Casa de la Monta, un edificio histórico levantado en este enclave por Carlos III para albergar las antiguas caballerizas de la Real Yeguada de Aranjuez, se realizaron obras sin licencia. Además, certifica que el 20 de septiembre de 2014 se celebró, sin autorización, la boda de la hija del administrador único del UTE.
El informe negativo también ha sido celebrado por la Plataforma Salvemos Sotomayor, creada ex profeso por varios colectivos ecologistas y sociales para protestar contra la construcción del complejo. El plan despertó el rechazo de estos colectivos, aunque prometía ser un nuevo enclave de generación de riqueza en el municipio con la creación de 2.000 puestos de trabajo, entre directos e indirectos. La plataforma entiende que el proyecto era "especulativo" y ponía en riesgo el espacio. Raúl Urquiaga, miembro de Grama (Grupo de Acción para el Medio Ambiente), sostiene que la adjudicación de la finca se hizo en "condiciones ventajosas". "El alquiler anual era de 30.000 euros, superbarato", afirma. Urquiaga asegura que en el documento de adjudicación el precio estaba tachado y puesto luego con bolígrafo: "No sé si era legal o ilegal, pero sí que daba un mal aspecto".
Finca pública en manos privadas
"Es algo que solían hacer los gobiernos de Esperanza Aguirre y de Ignacio González: dar la gestión de una finca pública a manos privadas, por lo general a grupos de amigos, como en este caso", explica Urquiaga. Para este ecologista, la gestión privada que la Comunidad pretendía para la Dehesa de Sotomayor no tenía "ningún beneficio para la población local". Como alternativa al complejo hípico y hotelero, plantea la posibilidad de darle a la finca un uso agropecuario que favorezca la economía local y tenga "un claro sentido de respeto y conservación" del medio. En particular, se muestra preocupado por la supervivencia del pítano, una especie vegetal endémica de la región al borde de la desaparición y que se encuentra especialmente en este lugar.
En enero de 2014 el Gobierno regional, entonces presidido por Aguirre (PP), emitió un informe de viabilidad urbanística favorable al proyecto. Su construcción, sin embargo, llevaba años gestándose. La explotación de la parcela, propiedad de la propia Comunidad, recae desde marzo de 2011, y por 30 años, en el grupo empresarial Ocio Sotomayor, el único que se presentó a la licitación pública. La sociedad se comprometió a realizar una inversión de 15 millones de euros en el complejo, que incluía la rehabilitación de la Casa de la Monta. A cambio, la Administración pública recibiría un canon anual de 30.000 euros.
El estudio pretendía levantar varias pistas de competición y entrenamiento, graderíos, cuadras para 1.050 caballos, centro veterinario y un complejo hotelero compuesto por 96 cabañas lujosas (28 tipo suite), edificio de recepción, restaurante, gimnasio, piscinas, pistas de tenis, campos de fútbol, jardines y viveros. En total, la superficie edificada abarcaría 38 hectáreas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.