Colau suspende el pleno de presupuestos hasta lograr apoyos

El Gobierno de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha anunciado este lunes que finalmente ha decidido "aplazar" el pleno extraordinario en el que estaba previsto votar la modificación presupuestaria de 275 millones de euros. La suspensión llega tras constatar la falta de apoyo suficiente para sacar adelante las cuentas el viernes pasado. Colau tenía asegurado el voto favorable de ERC y PSC, pero le faltaban los votos de la CUP, que anunció que votaría no.

Con mayor o menor dureza, todos los partidos de la oposición han criticado la incapacidad del partido de la alcaldesa para lograr un mínimo consenso. Incluso Alfred Bosch, que escenificó el jueves pasado el sí de ERC: "Estamos estupefactos, llevamos meses hablando de presupuestos, no sé hasta qué punto son conscientes de que nos jugamos Barcelona", ha dicho antes de pedir "responsabilidad y negociar hasta la extenuación". El líder del PSC en el Consistorio, Jaume Collboni, ha dicho que la imposibilidad de aprobar las cuentas es una "mala noticia" y ha lamentado que Colau "no pueda ser coherente con los electores y luchar contra las desigualdades". Collboni ha apelado "al espacio central" del plenario antes de recordar que él facilitó con una abstención las últimas cuentas del exalcalde Xavier Trias (CiU). El socialista ha pedido "esfuerzo de diálogo y humildad" al Gobierno y ha advertido a la CUP que "los ciudadanos no entenderán ni perdonarán a quien coloca palos en las ruedas".

Durante el pasado fin de semana, el portavoz y responsable de Economía del Gobierno, Gerardo Pisarello, ha intentado reconducir la situación: primero citando a la CUP, que no acudió a la reunión; y después encomendándose a Ciutadans, que también se ha negado a apoyar la modificación. Esta mañana ha vuelto a citarse con la CUP, que está dispuesta a negociar las cuentas a partir de mañana, pero no a toda prisa.

Pisarello ha comparecido este mediodía: "El objetivo del aplazamiento es seguir con las conversaciones con los grupos municipales para garantizar los apoyos necesarios", ha dicho. "Cada día que pasa es más urgente y es más difícil ejecutar partidas" para inversiones o políticas sociales, ha añadido. Mañana volverá a reunirse con la CUP, con quien la reunión de esta mañana ha sido "muy satisfactoria". Como hizo el sábado la alcaldesa, su portavoz ha lanzado "un llamamiento a la responsabilidad" de todos los grupos para aprobar lo que, ha recordado, "son unos presupuestos muy dialogados".

Una de las opciones que hay sobre la mesa es negociar a contrarreloj durante esta semana y llevar la votación de las cuentas al pleno ordinario previsto para este mismo viernes, día 29. De todos modos, la CUP, a través de su portavoz, María José Lecha, ha advertido de que una semana da poco margen de decisión de acuerdo con sus ritmos asamblearios. Con todo, ha celebrado "un cambio de actitud, más receptiva" de Pisarello en la reunión de esta mañana.