Puigdemont: un emprendedor del bien público
La trayectoria empresarial de Carles Puigdemont anterior a su entrada en política destacó sobre todo por sus proyectos con Administraciones públicas
La trayecctoria profesional de Carles Puigdemont antes de saltar a la arena política en 2006 destacó por ser un baile de proyectos para Administraciones públicas. Su hiperactividad promocionando empresas de comunicación fue directamente proporcional al apoyo que recibió de ayuntamientos, diputaciones y gobiernos para que sus ideas se hicieran realidad. Puigdemont ha sido sobre todo un emprendedor privado de proyectos públicos.
El presidente de la Generalitat es periodista de oficio. Entre 1979 y 1994 trabajó para el diario El Punt, llegando a ser redactor jefe. En 1994 fundó su primera empresa que dejó huella, Cat Edicions, una sociedad que ofrecía servicios de prensa a ayuntamientos de la provincia de Girona. Cat Edicions evolucionó en un servicio de comunicación público por internet, InfoGi. La Diputación de Girona lo presentó como un proyecto propio en 1998. La revista Antena Local explicó en 1998 que “está previsto que InfoGi pase a ser gestionada por CLCC y que se extienda a todo el principado”. CLCC es el Consejo Local y Comarcal de Comunicación, un ente que crearon las tres diputaciones controladas entonces por CiU, Girona, Lleida y Tarragona. El CLCC acogió el proyecto empresarial más grande que puso en marcha Puigdemont, Intracatalònia. Esta sociedad es la gestora de la Agencia Catalana de Noticias (ACN). La ACN fue en un primer momento un medio público de las tres diputaciones. Durante la dirección de Puigdemont, la ACN pasó en 2000 a ser de titularidad privada, adquirida por el grupo Planeta y Caixa Catalunya. En 2002, el año que Puigdemont abandonó la dirección, la Corporación Catalana de Radio y Televisión —la actual CCMA— adquirió el 51% de Intracatalònia. La totalidad de la sociedad pasó a manos de la Generalitat en 2005. Un portavoz del presidente explica que Puigdemont siempre quiso que la ACN se mantuviera en manos públicas.
En septiembre de 2002, una vez dejó la ACN, Puigdemont asumió su primer cargo público desligado de sus proyectos, director de la Casa de Cultura de Girona —dependiente de la Diputación de Girona. Puigdemont aparecía en aquella época repetidamente en los boletines del Ayuntamiento de Girona como moroso de impuestos municipales: del IBI, del IAE, la tasa de basuras y la de circulación.
Las notificaciones por deudas empezaron en 1997 y finalizaron en mayo de 2006, un mes antes de ser nombrado candidato por CiU a la alcaldía de Girona. Quien tenía que ser el candidato, Carles Mascort, renunció ese mayo por sorpresa a encabezar la lista tras haber recibido amenazas de muerte contra su familia. En total, durante nueve años, Puigdemont fue advertido 24 veces por impago de impuestos —incluido un aviso del Ayuntamiento de su localidad natal, Amer—, de la Seguridad Social e incluso por embargos. Puigdemont llegó a deber al Ayuntamiento de Girona más de 1.600 euros, según el Boletín Provincial. Puigdemont justifica que parte de estos retrasos se debían a cambios de domicilio “y a cuestiones particulares”.
Carles Puigdemont fue advertido 24 veces por impago de impuestos locales
Puigdemont asumió la dirección de la Casa de Cultura con la principal misión de coordinar el trabajo entre la Generalitat y el Gobierno español de la que sería la Biblioteca Pública Carles Rahola: “Puigdemont llevará a cabo la coordinación entre el Ministerio de Cultura y la Generalitat de Cataluña. También deberá dirigir la redacción del proyecto de usos del nuevo equipamiento una vez entre en uso la nueva biblioteca”. El proyecto no se inició hasta cinco años más tarde. El espacio se inauguró en 2014 con Puigdemont siendo alcalde.[LADILLO][*****] La principal inciativa de Puigdemont al frente de la Casa de Cultura fue una exposición sobre el paso de George Orwell por la Guerra Civil. En una entrevista de 2003 para la televisión municipal de Girona, el presidente justificó la muestra porque Orwell “es un escritor que tuvo el detalle de poner el nombre de nuestro país, Cataluña, en uno de sus libros más célebres, que de alguna manera internacionalizó la marca Catalonia”. El comisario de la exposición fue Miquel Berga, profesor de Literatura Inglesa en la UPF. Berga relevó en 2011 a Puigdemont al frente de Catalonia Today cuando Puigdemont, por entonces ya diputado. asumió la alcaldía de Girona.
Puigdemont fundó Catalonia Today en 2004. Este periódico en inglés ha estado desde su inicio vinculado a Hermes, editora de El Punt Avui. Tanto Berga como la mujer de Puigdemont, Marcela Topor, trabajan actualmente en Catalonia Today. El periodista Xavier Rius explicó en 2005 en el digital e-Notícies que Puigdemont le sugirió otra propuesta para internacionalizar la identidad catalana desde el ámbito público: “Hace unos días vino a verme Carles Puigdemont para hablar de negocios y me dio una idea brillante: reconvertir Catalunya Cultura —emisora pública hoy desaparecida— en Catalunya English”.
El 'president' quería que la Agència Catalana de Notícies se mantuviera bajo titularidad pública
Puigdemont creó en 2006 la empresa Doble Utopia con el director de Catalunya Ràdio, Saül Gordillo. Doble Utopia era propietaria de Poliblocs, una plataforma de blogs que en 2009 pasó a controlar el diario digital El Singular. El Confidencial informó que los medios de comunicación administrados por Puigdemont recibieron más de 480.000 euros en subvenciones de la Generalitat. El presidente ha asegurado que estas ayudas eran perfectamente legales y que fueron concedidas por Gobiernos de CiU y del tripartito.
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