Condenado a cárcel el hermano del expresidente de Emarsa por blanqueo

La Sección Tercera de la Audiencia de Valencia ha condenado a dos años de cárcel a Carlos Crespo, hermano del expresidente de Emarsa, ex número dos de la Diputación de Valencia y antiguo alcalde popular de Manises Enrique Crespo. Los jueces han encontrado culpable a Carlos Crespo de un delito de blanqueo de capitales, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.

El fallo acoge la tesis de la fiscalía y de la acusación particular de que el dinero que Carlos Crespo ingresó en Andorra provenía de fondos desviados de la Empresa Municipal de Aguas Residuales Sociedad Anónima (Emarsa), la entidad pública que depuraba las alcantarillas de Valencia y una treintena de poblaciones cercanas. "Contribuyó a ocultar o encubrir el origen delictivo del dinero de referencia, sabiendo que su procedencia era delictiva", indica la sentencia. El acusado mantenía que el capital ingresado en una cuenta de la Banca Privada d'Andorra, 350.000 euros, en la que autorizó a su hermano, provenía de pagos "en negro" que le habían hecho clientes de su asesoría fiscal e inquilinos de sus inmuebles.

Carlos Crespo ha anunciado que recurrirá la sentencia porque los jueces han dado "por supuesto" la comisión de delitos por parte de su herman sin que el juicio oral se hayan practicado pruebas al respecto.

Organizada como una asamblea metropolitana, Emarsa quebró y fue disuelta en 2010. El ministerio público y el juez instructor Vicente Ríos consideraron que el colapso económico se debió a la apropiación de 23 millones de euros por parte de los directivos y presuntos cómplices.

La sentencia incluye una multa de 500.000 euros y el pago de una indemnización de 357.000 euros. Los magistrados han apreciado la atenuante de reparación del daño porque el condenado depositó 350.000 euros antes del inicio del juicio.

Los miembros de la familia Crespo tiene todavía varias causas abiertas. Entre ellas la que investiga la supuesta ocultación de un premio de 12,5 millones de euros de la Lotería con el supuesto objetivo de evitar que le fuera embargado a Enrique Crespo. Éste fue durante años vicepresidente de la Diputación de Valencia a las órdenes de Alfonso Rus, el defenestrado dirigente popular grabado en supuestas corruptelas por el ex alto cargo Marcos Benavent. Cuando el juez Ríos procesó a Crespo, Rus aseguró a los medios que su antiguo número dos no le había "defraudado".