Fiscalía mantiene que Alperi toleró el fraude millonario de Mercalicante

El agujero de seis millones de euros registrado en Mercalicante no pudo producirse sin el conocimiento de los cinco miembros de la comisión ejecutiva de esta empresa pública, entre ellos el exalcalde y exdiputado del Partido Popular Luis Díaz Alperi. Es la conclusión a la que ha llegado la Fiscalía Anticorrupción en la última sesión judicial de un caso ocurrido a inicios de la pasada década y cuyo principal acusado es el anterior exgerente del mercado mayorista y fugado de la Justicia, José Emilio Clavero.

El fiscal Felipe Briones ha desarrollado durante una hora el informe de uno de los primeros escándalos que afectaron a la ciudad de Alicante en su historia democrática y que comenzó a juzgarse la semana pasada. Su tesis choca con la sentencia del Tribunal Superior de Justicia valenciano, que exoneró al entonces también diputado aforado Luis Díaz Alperi y con las de la Audiencia Provincial, que hizo lo propio con los otros miembros ejecutivos.

Clavero “no pudo cometer tanta fechoría como se le atribuye sin el conocimiento ni el consentimiento de su comisión ejecutiva”, ha asegurado el fiscal. Briones acusa a los miembros de la comisión de avalar una facturación “ilegal” de casi cinco millones en sobrecoste en el proyecto de ampliación de este ente participado por el Ayuntamiento de Alicante y el Ministerio de Agricultura.

Los miembros entonces de aquella comisión fueron el Díaz Alperi como presidente, los concejales Juan Zaragoza y José María Galant, y los funcionaros del ministerio de Agricultura, Gonzalo Simón y Segundo Bermejo. En un principio estuvieron imputados en el caso, si bien fueron eximidos al no apreciar la magistratura que actuaran “con dolo”. Todos ellos acudieron como testigos ante el juez la semana pasada -salvo Bermejo, fallecido-, y no dudaron en apuntar a Clavero como alguien que urdió un plan para estafar a la Mercalicante.

“A la empresa le interesaba cargar toda la responsabilidad que tenía, todo, al señor gerente”, ha sostenido Briones. Clavero “no pudo cometer tanta fechoría como se le atribuye sin el conocimiento ni el consentimiento de su comisión ejecutiva”. La conclusión de fiscalía

El juicio del caso Mercalicante ha servido para airear la falta de control que existió en una entidad responsable de nutrir al comercio mayorista de la ciudad. En una de las sesiones celebradas la semana pasada quedó constancia de la autorización de pagos millonarios sin apenas control. Estas cantidades fueron usadas para pagar un Máster en Bolsa a Clavero y posteriormente invertir en acciones farmacéuticas, comprar una vivienda de lujo en Barcelona o patrocinar un equipo de balonmano o un coche de rally.

De los nueve acusados por las distintas partes involucradas en este fraude millonario -ninguno con responsabilidad política-, dos se han dado a la fuga, entre ellos Clavero. De los otros siete acusados, Briones ha pedido que se mantenga únicamente la acusación de delito societario sobre el jefe de Contabilidad y Administración, Miguel Ángel Ramo.

Este firmó el pago de un recibo de cerca de 300.000 euros a la empresa de informática Tenos en 2002 y que nunca fue abonado para “burlar una contabilidad fidedigna”. El fiscal pide un año de cárcel para él.