Verano en Sevilla, “un tiempo en el que se posterga la vida”

Una historia de amor muy poco romántica. Dos seres que no esperan nada de la vida se encuentran en una azotea de un barrio del centro de Sevilla en pleno verano, cuando el termómetro rebasa con asiduidad los 40 grados y la realidad parece detenerse, derretida por el calor. En Solo amanece si estás despierto, la última novela de José Luis Rodríguez del Corral (Morón de la Frontera, Sevilla, 1959) que acaba de publicar Siruela en su colección Nuevos Tiempos, el calor asfixiante del verano es uno de los principales protagonistas. La obra es la cuarta que publica el escritor sevillano, quien salió del anonimato en 2003 cuando ganó el premio La Sonrisa Vertical con Llámalo deseo. Con Blues de Trafalgar, también basada en la sociedad actual como la última que acaba de publicar, obtuvo el Premio Café Gijón en 2011.

“Desde junio hasta septiembre se posterga la vida. En verano todo se paraliza, ya no hay que tomar decisiones. Esto que es algo que realmente ocurre en Sevilla cada verano y que supone un retraso tremendo para la ciudad, para mis personajes es positivo, porque les ofrece una tregua en sus vidas”, comenta Rodríguez del Corral en Sevilla, ciudad en la que vive desde los 18 años, cerca del céntrico barrio de San Lorenzo, donde sus personajes han convertido la azotea de su casa en una isla en la que pueden escapar de sí mismos.

“El amor es un tema que ya he tocado antes, pero no era el fundamento de la novela como ocurre ahora por primera vez. Son dos personajes que se agarran el uno al otro como tabla de salvación. Son dos náufragos que están obligados a aprender a sobrevivir”, comenta el autor, que ha dirigido una librería durante más de 20 años en Sevilla, La Roldana, y que comenzó escribiendo poesía.

La prosa te abre un abanico más amplio de posibilidades expresivas José Luis Rodríguez del Corral

Los náufragos sentimentales son Felipe, un hombre de 50 años que hizo una buena fortuna con negocios con la Administración no demasiado lícitos y lo ha perdido todo hasta el punto de que ha tenido que irse a vivir con su anciana madre, y Amparo, una profesora de francés treintañera que ha intentado suicidarse y parece haberse dado una tregua, la del verano. Ambos coinciden en la misma casa del barrio de San Lorenzo, donde reina el Cristo del Gran Poder, y convierten la azotea en territorio común en el que salta una pequeña chispa de esperanza.

La obra refleja la nostalgia que siente su autor de la vitalidad que invadía a Sevilla en la década de los 70 y principios de los 80, algo que, en su opinión, ha desaparecido. “Las ciudades tan volcadas en sus tradiciones y en el pasado no tienen proyecto de futuro. Aquí se vive bien y parece que a eso es a lo que aspiramos, pero faltan muchas cosas”, afirma Rodríguez del Corral.

“Solo amanece si estas despierto es una novela más esperanzada que optimista. Las novelas optimistas son raras hoy en día. Describo la situación que estamos viviendo, los casos de corrupción en los que el protagonista está envuelto, pero solo para explicar las circunstancias de los personajes. La trama no se centra en eso”, explica el autor, quien reconoce que empezó tarde a escribir novela, casi con el nuevo siglo, porque antes se había centrado en la poesía, aunque nunca ha publicado sus versos.

“La prosa te abre un abanico más amplio de posibilidades expresivas. Pero no he abandonado del todo la poesía, también se pueden hacer poemas en prosa. Yo siempre trato de escribir con el sentido absoluto que debe hacerlo un poeta”, confiesa Rodríguez del Corral, un perfeccionista que no duda en volver una y otra vez sobre lo escrito. “Me fuerzo mucho en darle ritmo a la escritura. Si abordo temas complejos quiero que todo sea inteligible para el lector, que no haya barreras de cultismos, aunque sin caer en un estilo ramplón”, concluye el escritor.