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Parada la planta potabilizadora del Llobregat por un vertido

La Generalitat investiga el origen del accidente, que, asegura, "no es peligroso"

Dani Cordero

Un vertido de origen desconocido ha obligado a Aigües de Barcelona (controlada por Agbar) a descartar la potabilización del agua del río Llobregat. Su planta de Sant Joan Despí lleva más de diez días sin tratarla tras detectar dioxanos, un compuesto habitualmente vinculado a la fabricación de resinas. La Agència Catalana del Aigua (ACA) confirmó ayer el problema, afirmó que está investigando el origen y subrayó que el agua contaminada no ha llegado a la red de suministro de los hogares de Barcelona. Fuentes de Agbar señalaron que el componente “no es peligroso”, si bien se ha descartado el tratamiento del agua contaminada por el fuerte olor que desprende.

Las analíticas preventivas detectaron el compuesto a partir del 29 de enero, pero la concentración se disparó hace dos semanas. Desde entonces, la planta sigue funcionando, pero solo a un tercio de su capacidad máxima. De los 5,3 metros cúbicos por segundo que se pueden tratar en Sant Joan Despí, solo se están utilizando 1,8. El agua tratada procede de los pozos, libres de contaminación. Agbar se asegura el resto del suministro a través del sistema de la compañía Aguas Ter-Llobregat, una suerte de mayorista del agua.

Agbar denunció ayer que el problema no es suyo, que corresponde a la ACA resolverlo y que están redactando un recurso con el que reclamar la aceleración de la investigación. La compañía, que está en guerra con la Generalitat y con Acciona —la principal accionista de ATLL—, dice que el foco del vertido se encuentra en las plantas de Abrera e Igualada, gestionadas por la compañía privatizada en 2012.

Curiosamente, Agbar tendrá que fiar a ATLL una mayor parte del agua que acaba suministrando a los hogares del área metropolitana de Barcelona, pese a que desde noviembre del año pasado decidió dejar de pagarle al considerar que varias sentencias del Tribunal Supremo invalidaban el contrato de concesión. Actualmente le debería lo correspondiente a dos mensualidades. La factura del pasado mes de agosto era de 9,9 millones de euros.

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Sobre la firma

Dani Cordero
Dani Cordero es redactor de economía en EL PAÍS, responsable del área de industria y automoción. Licenciado en Periodismo por la Universitat Ramon Llull, ha trabajado para distintos medios de comunicación como Expansión, El Mundo y Ara, entre otros, siempre desde Barcelona.

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