El Gobierno replica que la prioridad son los problemas de los ciudadanos

El Gobierno y la mayoría de los partidos políticos arremetieron este martes contra el anuncio de Artur Mas de convocar las elecciones catalanas para el 27 de septiembre. “Cataluña no necesita elecciones”, sino que se atienda “a los problemas de los ciudadanos”, aseguró el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón. En su opinión, el Gobierno de la Generalitat ha renunciado a este objetivo y, con el anticipo electoral, Mas “ha dado por terminado su tiempo de gobierno”.

Horas antes de que Mas realizara su anuncio, Mariano Rajoy, también se mostró contrario al adelanto electoral y desde Atenas aseguró que no se trata de una prioridad para los catalanes. “Creo que hay que fijar las prioridades y la prioridad hoy es luchar contra la crisis”, dijo.

Del mismo modo, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, criticó el adelanto de los comicios. El dirigente socialista escribió en su cuenta de Twitter: “Un nuevo fracaso: Mas no tendrá lista conjunta y vuelve a anticipar las elecciones. Dos partidos incapaces de gobernar juntos prometen el paraíso”, escribió el dirigente socialista en su cuenta de Twitter.

En esa misma línea, Alicia Sánchez-Camacho, presidenta del PP de Cataluña, aseguró que el avance de las elecciones es la “crónica de un fracaso anunciado” y advirtió que resulta “muy perjudicial” para los catalanes. “Mas hace mucho tiempo que dejó de gobernar. El avance de elecciones vuelve a demostrar que solo ha pensado en los independentistas y no en los 7,5 millones de catalanes”, añadió.

Por su parte, el presidente de Ciutadans, Albert Rivera, se mostró muy contundente. “Mas ha hecho de trilero y ha engañado a los catalanes convocando elecciones para dentro de siete meses en el momento en el que la corrupción acecha a CiU”, declaró a la COPE. “Mas sabe hacer de todo menos gobernar: hacer propaganda, mentir y engañar a la gente”, dijo. El líder de Ciutadans alertó que, con el acuerdo, “ERC y sus socios separatistas blindarán a CiU en la comisión de investigación del caso Convergencia del Parlament y apoyarán unos Presupuestos trampa”. También denunció que "Cataluña lleve una década paralizada con un debate identitario de hojas de ruta".

El portavoz de Izquierda Unida en el Congreso, José Luis Centella, intepretó que el adelanto electoral pone de manifiesto que Mas “está buscando una salida personal al callejón sin salida al que ha llevado al pueblo catalán”. En su opinión, resulta “Poco serio” esa convocatoria electoral “en diferido”.

El número dos de UPyD, Carlos Martínez Gorriarán, reprochó a Artur Mas, que quiera convertir los comicios en un plebiscito para la independencia.

De manera muy distinta se expresaron los representantes de las tres entidades soberanistas que asistieron a la reunión. “Estamos satisfechos, aunque nos sentimos un poco como lo que pasó con el referéndum, no era ni la fecha ni la pregunta que habíamos elegido. Sin embargo, el 9-N fue un éxito y ahora ya tenemos una fecha: el 27 de septiembre, que será cuando ganemos la independencia”, explicó Carme Forcadell, presidenta de la Asamblea Nacional Catalana. acompañada por Muriel Casals, presidenta de Òmnium Cultural, y por el presidente de la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI) y alcalde de Vic, Josep Maria Vila d'Abadal.

Forcadell celebró que se haya rehecho la confianza y la unidad y el camino para retomar el camino a la independencia. La ANC apostaba por una lista única transversal que “aglutinase a todas las sensibilidades”, pero aceptará las listas separadas si eso supone mantener vivo el proceso soberanista. Sobre la posibilidad de que miembros de la entidad puedan ir en alguna de las listas electorales que concurran en esos comicios, Forcadell no se quiso pronunciar y dijo que eso es una “segunda etapa”.