2,5 millones de huevos fritos congelados al mes

2,5 millones de huevos son muchos huevos. Pero si además son mensuales, resulta que al año suman 30 millones ya fritos y congelados. Esa es la cantidad máxima que de momento va a poder ultracongelar el cocinero aragonés, pero afincado en Vitoria Javier Yzuel, aunque en cinco años esa cantidad va a crecer a ritmo exponencial. Después de miles de unidades estropeadas, de pruebas y desvelos, han dado con la fórmula para ultracongelar los huevos fritos, y patentarlo, pese a que desde 1951, cuando se documentó el primer intento por hacerlo, habían fracasado varios. El cocinero aragonés ha conseguido compatibilizar el 98% de agua que tiene la clara, con la yema que es pura proteína, y ha logrado la patente.

Yzuel además ha superado ya las certificaciones IFS e ISO 22.000, para su proceso de elaboración y sigue adelante con todo lo relacionado con el etiquetado y otros procesos que exige la industria. Las dos primeras empresas que han confiado en su manera de hacer, y en el resultado, un huevo cremoso, una vez descongelado, que va a solucionar muchos problemas, sobre todo a los hoteles, son Findus y Makro. Descongelarlo cuesta en un horno de vapor en torno a cuatro minutos y medio. Pero también se puede descongelar en el frigorífico durante cuatro horas y en el microondas, explica Yzuel, sin perder textura ni calidad. Con Findus va a acometer la internacionalización.

El cocinero, que está estos días en la República Dominicana explica: “Además de Findus, con el que hemos acordado un plan de expansión por toda Europa en cinco años, tenemos otro acuerdo cerrado con Makro para comenzar a servir a primeros de año”, y están negociando con varias compañías más nacionales e internacionales. “El producto es tan sorprendente que la propia industria está muy cautelosa”, justifica Yzuel. Al ser una solución tan eficaz nadie quiere lanzarlo sin haber superado todos los criterios de calidad y exigencia. “Estamos terminando de validar procesos que nosotros tenemos claros con multinacionales de primer nivel así que pronto ampliaremos nuestra cartera de clientes y socios”, indica seguro de su éxito.

Lo que comenzó como un proyecto de fin de curso, y que su tutor le obligó a abandonar, se ha convertido en el primer éxito comercial a gran escala de su carrera. “Hemos conseguido estandarizar un producto tan interesante y de tanta rotación como el huevo frito, y sabíamos que, de hacerlo, tendríamos un nicho de mercado fabuloso”, aseguró el miércoles Yzuel desde la República Dominicana. El producto, según asegura, ofrece todas las garantías sanitarias al someter el huevo a un choque térmico que evita la salmonela y ahorra costes en instalaciones, materias primas y personal.

Sabíamos que tendríamos un nicho de mercado fabuloso"

En la planta de producción que tienen en Vitoria han pasado de una capacidad de producción de un millón de huevos fritos ultracongelados al mes, a una producción cercana a los 2,5 millones. La internacionalización va viento en popa. “Ya hemos firmado acuerdos de expansión con dos países fundamentales en este capítulo”, pero Yzuel insiste en que deben de ser cautelosos y comprometerse solo con aquello que puedan cumplir. “2015 está prácticamente cerrado por falta de fechas para implantar en más países nuestro sistema de trabajo”, explicó. El huevo frito no es el único producto que van a poner en el mercado. “Estamos desarrollando otro producto fantástico, con muchísimo más recorrido que el actual”, y que podría ayudar a muchas personas de países con problemas de alimentación a superar la carencia de proteína.

“Pero por falta de acompañamiento financiero estamos trabajando a medio gas”, lamenta. En su opinión la situación del capital en España es lamentable. “Nos venden que hay que emprender pero a la hora de la verdad, a un banco le interesa más un piso libre de cargas que una idea acompañada de miles de horas de trabajo, un equipo sólido con conocimiento demostrado, contratos firmados y compromiso por parte de la empresa. Es increíble pero ningún banco sabe valorar el precio de la patente”, critica.