La escultura icónica de Plensa para Barcelona, en ‘stand by’
El proyecto para instalar una enorme cabeza metalizada al final del Paseo Marítimo, paralizado por el Ayuntamiento
“No hemos recibido noticias del Ayuntamiento de Barcelona desde que entregamos al proyecto, hace casi un año”, aseguran fuentes próximas al escultor Jaume Plensa (Barcelona, 1955), uno de los creadores españoles más reconocidos, con obras repartidas por todo el mundo y galardonado con un buen puñado de los premios más destacados. A comienzos de 2014 se supo que el propio alcalde Xavier Trias le había pedido a Plensa que “imaginara” una pieza icónica para la ciudad, que todo el mundo que llegara en avión a Barcelona pudiera ver desde el aire e identificara la ciudad, más allá de sus edificios. Lo explicó el propio escultor en Andorra, el mismo día que inauguraba 7 poetes, una de sus últimas obras, formada por siete figuras arrodilladas que cambian de color mientras otean, subidas en sus atalayas, las montañas que envuelven este pequeño país.
“A Barcelona le falta un icono que no sea práctico, que solo sea para el corazón y que pueda dar buena energía”, aseguró el artista. El proyecto de Plensa, uno de los mayores secretos guardados hasta ahora, es una enorme cabeza instalada dentro del mar que se instalará al final del Paseo Marítimo de la Barceloneta. Con la idea de diferenciar esta obra de otras esculturas del autor, la obra pensada por Plensa para su ciudad no será del color blanco que le confiere el polvo de mármol que recubre la resina, sino que tendrá un acabado plateado metálico.
La obra propuesta para Barcelona estaría a caballo, por sus dimensiones, de Dream, una pieza de 20 metros de altura que instaló en St. Helens, en la campiña inglesa en 2009 y, por otro lado, de Awilda, otra escultura con forma de cabeza de mujer, esta vez de 12 metros, instalada dentro del mar durante tres meses de 2012 en la Bahía de Guanabara, Brasil, frente a la famosa montaña del Pan de Azúcar.
Desde hace casi un año no ha habido respuesta al proyecto del escultor
Según las mismas fuentes, desde la presentación del proyecto no ha habido más contacto entre el escultor y el ayuntamiento, por lo que no se ha discutido el tamaño final de la obra ni se ha comenzado a estudiar cómo solucionar los problemas que puede ocasionar el estar instalada dentro del agua.
“Le encantó la idea del encargo y se puso rápidamente en marcha, pero la situación institucional es muy compleja. Por ahora no hay nada, quizá en un futuro se pueda tirar adelante, pero ha pasado mucho tiempo y no hay respuesta. Plensa esperará pacientemente”, aseguran esta fuentes que mantienen que el tiempo necesario para instalar una de las obras del escultor varía según la complejidad, “entre un año, como la reciente Roots, inaugurada en un espacio verde de Tokio, Japón, hasta cuatro años”, por lo que, con seguridad, en esta legislatura no podrá inaugurarse. Como la obra prevista para Barcelona, la escultura de Brasil, “tuvo un proceso muy complejo, hubo que pedir muchos permisos para instalarla en el agua y contar con el tema de las mareas. Fue un sufrimiento, por lo que Plensa siempre habla del milagro brasileño”, explican.
Con todo, la escultura de Plensa prevista para el final del Paseo Marítimo de la Barceloneta no es el único proyecto relacionado con el artista en la ciudad. En el Parc Camí Comtal de la Sagrera, una de las llamadas ágoras de este parque lineal que cubrirá las vías del AVE de árboles y arbustos, es la llamada “ágora Plensa". Según el plan director presentado en junio de 2012, se instalará allí otra enorme “escultura luminosa” del artista, junto otras obras de escultores como Anish Kapoor o Richard Serra. “Nadie nos ha informado nada sobre este proyecto”, aseguran las mismas fuentes relacionadas con el escultor.
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