La juez De Lara registra durante 11 horas la Diputación de Lugo
Requisados documentos de un programa de visitas y de la relación con el Breogán
La titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo, Pilar de Lara, volvió a sobresaltar ayer a las principales instituciones de la provincia. De Lara se presentó por la mañana en la Diputación de Lugo y encabezó personalmente un registro que se prolongó durante 11 horas y que incluyó el rastreo de documentos y cajones así como el volcado del contenido de varios ordenadores de funcionarios del organismo. Los registros se centraron en áreas dependientes de la Presidencia, que dirige el también secretario general del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, y de la Vicepresidencia, en manos de sus socios del BNG. Además, por orden de la juez también se vació el ordenador de un funcionario del Ayuntamiento de Lugo.
Los registros de De Lara se centraron, según fuentes de la Diputación, en documentos relativos a un programa llamado Kilómetro Cero, visitas medioambientales que la Diputación organiza por toda la provincia. Ese programa no está externalizado y lo gestionan los propios servicios de la Diputación. La investigación no está incluida en el macrosumario del caso Pokémon sino en otras diligencias abiertas tras una denuncia de una extrabajadora de la institución relativa al programa de visitas. La policía judicial ya había irrumpido el pasado julio en la sede del organismo que preside Besteiro para recopilar material relacionado con el mismo asunto. Entonces el PP aireó que en el programa podían haberse producido irregularidades de “relevancia penal”.
Según fuentes de la Diputación, en los registros la magistrada también se incautó de documentos relativos a la relación de ese organismo con el club de baloncesto Breogán, cuya presidente es el número dos del organismo provincial, el nacionalista Antonio Veiga. La Diputación fue en su momento accionista mayoritario del club y aún mantiene una participación en él después de haber sacado el resto a subasta pública. Los registros abarcaron además al gabinete de comunicación, de protocolo y relaciones institucionales así como de atención al ciudadano, contratación, fondos europeos y personal.
De Lara se presentó en la Diputación poco antes de las nueve y media de la mañana, acompañada de siete agentes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la policía. Los registros, que mantuvieron retenidos en las oficinas a varios funcionarios, no terminaron hasta las ocho y media de la tarde. Fuentes judiciales señalaron que se produjo un incidente con una funcionaria que trató de cambiar, antes de que los agentes interviniesen su ordenador, la contraseña de acceso.
El registro sorprendió a Besteiro camino de A Coruña, donde acompañaba a un enfermo en tratamiento contra el cáncer para sumarse a las denuncias sobre la falta de servicios de radioterapia en el hospital de Lugo, “Ofrecemos toda nuestra colaboración y transparencia”, señaló el líder socialista. El gobierno provincial, en un comunicado, aseguró que es “la primera interesada en que se esclarezca todo lo relacionado con este asunto”. La Diputación no permitió a los periodistas acceder a las oficinas, aunque posteriormente el portavoz del grupo socialista, Manuel Martínez, se disculpó por ello y recordó que las diligencias judiciales están bajo secreto.
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