Barberá presenta para el año electoral el presupuesto más alto de su mandato

Desde las cuentas municipales de 2010, fijadas en 799 millones de euros, el Ayuntamiento de Valencia no había tenido un presupuesto tan alto como el del anteproyecto que ha presentado públicamente la alcaldesa, Rita Barberá, con visible satisfacción. Cifrado en 738 millones de euros, supone una ligera subida anual del 1% (siete millones) tras el leve recorte del ejercicio anterior, que la oposición no ha dudado en calificar de “electoralista”, en un año con tres convocatorias a las urnas previstas, dos en mayo y una en noviembre. Según Barberá, las cifras son “consecuencia de una gestión austera, responsable y equilibrada llevada a cabo en tiempo de crisis” que, dice, “empieza a dar resultados” y hace del valenciano “un ayuntamiento saneado”.

Entre los rasgos que ha destacado en las cuentas de 2015 está el ahorro de 12 millones gracias, sobre todo a la disminución de la carga financiera y a la reducción de 5,2 millones de gasto en personal respecto al año anterior. Gracias a la refinanciación de la deuda, al aumento de transferencias del Estado y a la que Barberá califica de buena gestión de tributos, los presupuestos crecen moderadamente “con recursos propios, sin recurrir al crédito”. Y no ha dudado en asignar un “carácter marcadamente social” al presupuesto, que incrementa en 1,7 millones la partida de Bienestar Social.

Las inversiones pasan de 30 millones en 2014 a 41 millones en 2015, en realidad siete menos si se descuenta la cantidad destinada expropiaciones. Entre las inversiones, Barberá cita 700.000 euros para comprar inmuebles en El Cabanyal, 2,5 millones para aceras y calzadas; otros dos en obras de urbanización en barrios y pedanías; 900.000 para intervención en el entorno de La Lonja; 500.000 para la demolición del Ayuntamiento de la Avenida de Aragón, o 100.000 para el polémico toldo de la Plaza de la Virgen. La partida para mantenimiento del alumbrado y fuentes ornamentales se sitúa en 4,1 millones de euros.

La crítica de electoralismo del portavoz socialista, Joan Calabuig ha apuntado al aumento en dos millones del gasto en limpieza viaria o mantenimiento de jardines “tras haber recortado en cerca de 27 millones desde 2009 las principales partidas destinadas a limpieza y mantenimiento”. Tanto Calabuig como la portavoz de EU, Rosa Albert, han criticado el elevado gasto en pago “a los bancos” (106 millones) por la deuda y la partida dedicada a seguir con el plan de El Cabanyal y “derribar” las casas compradas. La concejala de EU ha lamentado también que los presupuestos no recojan “inversiones de calado”.