ICV, PP y C’s piden dejar sin privilegios a los expresidentes en caso de delito

El Parlament debatirá la próxima semana la reforma del estatuto de los ex presidentes de la Generalitat a propuesta del Partido Popular (PP), Iniciativa per Catalunya (ICV-EUiA) y Ciutadans (C's) , que han presentado sus respectivas proposiciones de ley para retirarles sus privilegios y prerrogativas en caso de delito o de actividades ilegales. La Mesa y la Junta de Portavoces de la Cámara acordó ayer celebrar el debate de las tres proposiciones de ley de reforma del estatuto de los expresidentes catalanes en el pleno que se celebrará del 12 y 13 de noviembre. CiU ha presentado enmiendas a la totalidad a cada una de las iniciativas de los tres grupos. Tras la confesión del fraude fiscal de Jordi Pujol, el Parlament le retiró todas las privilegios como el salario, la oficina del paseo de Gràcia y las distinciones.

En la iniciativa de los populares, y tras la confesión de Jordi Pujol, se propone que los expresidentes de la Generalitat pierdan los “derechos, reconocimientos, las atenciones y apoyos” en el caso de condena “firme” por delito, por el reconocimiento de la comisión de hechos delictivos o por haber cometido alguna “ilegalidad grave” o llevado a cabo actividades “incompatibles con la dignidad” y el decoro exigible a los que hayan ejercido este cargo.

Asimismo, el PP pide que la pérdida de las condiciones anteriores comporte la “obligación” de devolver el dinero y otras compensaciones recibidas en concepto de asignación mensual y pensión vitalicia desde el momento en el que se le reconoció el derecho a recibirlos.

En la misma línea, la proposición de ley de los ecosocialistas reclama que los derechos y prerrogativas de los expresidentes puedan ser revocados “total o parcialmente” en el supuesto de “condena firme” o en el caso de que lo apruebe el Parlament, que deberá valorar si mantiene la honorabilidad “atendiendo a los hechos que se conozcan o se puedan constatar”.

Ciutadans propone que en el caso de que un expresidente incurra en actividades “inadecuadas, delictivas o ilegales”, el Parlament por mayoría de sus miembros podrá retirarle “todos los privilegios y prerrogativas otorgadas”. La actual normativa del estatuto de los expresidentes de la Generalitat data de 2003, y tanto el PP como los ecosocialistas registraron sus respectivas proposiciones de ley para reformarlo tras la confesión del expresidente de la Generalitat Jordi Pujol, que tuvo dinero oculto en el extranjero durante 30 años. Ciutadans siempre ha reivindicado cambios, si bien ahora ha introducido un punto vinculado a hechos delictivos.