El mercado internacional sustenta la recuperación de los aeropuertos

El aeropuerto de Sevilla-San Pablo llevaba desde diciembre de 2011 sin remontar el vuelo. Hasta el pasado abril. Ese mes, el número de pasajeros del recinto hispalense aumentó un 6,6% con respecto al mismo periodo del año pasado, en concreto, 372.009 viajeros. Lejos de tratarse de un dato puntual propiciado por fechas como la Semana Santa, desde entonces, las cifras del aeródromo han crecido mes a mes dejando atrás los números rojos de una muy sombría racha. Según las estadísticas, el gran artífice de este cambio de tendencia ha sido el incremento del mercado internacional. El mismo que, en el último año, ha consolidado la “fortaleza” del aeropuerto de Málaga-Costa del Sol y ha generado aumentos puntuales en el resto de recintos andaluces. En cifras globales, en el primer semestre de 2014, el incremento registrado en los seis aeropuertos de la comunidad ha sido del 5,4%.

El recinto sevillano cerró 2013 con una fuerte caída en el número de pasajeros (14,1%), casi 600.000 viajeros menos —que se sumaron a los más de 670.000 perdidos en 2012—. Pese a los malos resultados acumulados, el aeródromo afrontaba el presente ejercicio como una etapa de “estabilización”, en palabras de su director, Jesús Caballero, “ni con fuertes caídas ni tampoco con grandes subidas”. Pero la realidad ha superado cualquier previsión. A la subida del 6,6% experimentada en abril, le han seguido otras tres: 9,8%, en mayo; 8,8%, en junio; y 10,7%, en julio. Es más, tras casi tres años, el dato acumulado de pasajeros vuelve a ser positivo al superar en julio los 2,2 millones, un 2,4% más que en el primer semestre del año pasado. “El aeropuerto de Sevilla ha experimentado un cambio de tendencia que ya no tiene marcha atrás”, asegura el delegado de Turismo en el Ayuntamiento hispalense, Gregorio Serrano. Estas esperanzadoras cifras se conocen mientras Administraciones y agentes sociales y económicos ultiman un plan para reactivar el recinto.

Los buenos resultados del aeropuerto de Sevilla-San Pablo coinciden con los registrados en el de Málaga y en otros recintos andaluces. También con una nueva subida nacional. Según los datos facilitados por AENA y el Ministerio de Fomento, en los siete primeros meses del año, los aeropuertos españoles han experimentado un incremento en el número de pasajeros del 4,1%, rebasando los 110 millones de viajeros. En el caso del de Málaga, en el primer semestre, el número de pasajeros ha aumentado un 7,7% (6.156.799), con las mayores subidas en abril (14,4%), febrero (10,8%) y enero (9,5%). Estas cifras, como recuerdan desde la Consejería de Turismo, confirman al aeródromo malagueño como puerta de entrada de Europa en Andalucía.

La clave de estos incrementos es la “buena salud” del mercado internacional. De los 10 millones de viajeros que este primer semestre llegaron a la comunidad, el 71,2% pertenecía a tráfico internacional. Por ejemplo, en mayo, este sector creció un 24,8% en el aeropuerto de Sevilla, con respecto al mismo periodo de 2013. Ese mes, se registraron subidas considerables en mercados como el belga (89,3%), el suizo (71,8%) y el italiano (43,5%). Como apuntan desde el aeródromo, los dos primeros casos fueron por la inauguración de nuevas rutas: una segunda a Bruselas y otra a Basilea. A estos nuevos destinos, el aeropuerto de Sevilla sumó nuevas rutas, entre ellas, a Roma o Burdeos. “El aeropuerto de Sevilla tiene una gran dependencia del mercado nacional [representa el 61%], precisamente, uno de los más castigados por la crisis. De ahí la importante caída de estos años. Hay que invertir esa dependencia”, justifica Jesús Caballero. En el caso del de Málaga, el mercado extranjero ha permitido reforzar su liderazgo. “En el primer semestre, ha aumentado un 8,8% el número de viajeros extranjeros y un 7,5% el de los vuelos internacionales. Datos que revelan la tendencia alcista de este sector”, apuntan desde el aeropuerto de Málaga.

Además del repunte en este sector, AENA también reseña la “continuada mejoría” del mercado doméstico. “En el primer semestre, el turismo nacional ha experimentado una recuperación paulatina. En Sevilla, hemos notado que ha crecido entre un 5 y un 7% mensualmente”, explica Serrano.

El número de pasajeros en Andalucía creció un 5,4% este semestre

El objetivo señalado por Jesús Caballero es la piedra angular del plan de reactivación del aeropuerto sevillano elaborado por AENA, abierto a las aportaciones de la Junta y del resto de agentes. Entre otras medidas, se propone conectar la capital con los principales hubs europeos para propiciar la llegada de turistas estadounidenses y asiáticos así como abrir rutas a países como Turquía o Austria. Asimismo, con la mejora de las conexiones aéreas se persigue potenciar el turismo de cruceros y de ferias. “Sevilla tiene todas las características para poder ser destino de congresos y su aeropuerto no puede ser un obstáculo, por eso, hemos trabajado desde 2011 con ese objetivo”, apunta el delegado de Turismo. En sus aportaciones, el Gobierno andaluz —que a finales de año encabezó la bautizada Mesa Provincial por el Aeropuerto de Sevilla— suma a esta batería de medidas convertir el aeropuerto de Sevilla en “la principal puerta de entrada” no solo a esta provincia sino también a Córdoba y Huelva. “No es de recibo que el aeropuerto de entrada a Huelva sea Faro”, mantiene el consejero de Turismo, Rafael Rodríguez.

Además de criticar el retraso en el desarrollo de este plan estratégico —que AENA prepara también para los otros cinco aeropuertos—, Turismo urge a Fomento a que cierre paquetes turísticos con el aeropuerto de Sevilla que contribuyan a “aumentar y sostener” el número de pasajeros. “El Gobierno central debe ampliar el abanico y no concentrar las salidas en Madrid, Cataluña y la Comunidad Valenciana”, apuntan desde el departamento de Rodríguez, quien rechaza la privatización de AENA. Según la consejera de Fomento, Elena Cortés, la medida provocará en los aeropuertos andaluces “destrucción y precarización del empleo, merma del servicio público y empeoramiento de la calidad de la oferta turística”.