Mintegi se va ajena a la oposición dura de Bildu y a su papel diluido
Dimitirá de su escaño en septiembre tras verse relegada por una línea más agresiva
Laura Mintegi, ajena a la creciente dureza de EH Bildu en su oposición al Gobierno Urkullu y relegada a un papel secundario por su propio grupo en el Parlamento, ha preferido regresar a partir del próximo curso a la Universidad, “su auténtico mundo”, según sus más próximos, y donde no se la esperaba “de momento”. La cabeza de lista de la coalición soberanista abandonará su escaño en septiembre con el mismo grado de compromiso político de siempre con la causa abertzale, pero bajo un ánimo “cansado” tras una experiencia vital “donde cada vez se iba sintiendo menos cómoda”, admitieron ayer en el ámbito de la Cámara.
Desde Kurdistán, donde se encuentra desde hace unos días, Mintegi sorprendió desagradablemente, sin embargo, con el anuncio de su renuncia a la dirección de Sortu, auténtico núcleo duro en la estrategia de las marcas electorales de la izquierda independentista. Con su dimisión, explicada por medio de una carta en euskera en la web Naiz.info, Mintegi diluyó, sin duda, la repercusión mediática que Sortu pretendía con su intensa agenda política de este jueves. Los dirigentes abertzales procuraban exprimir lógicamente el alcance de la reunión en Bilbao con el PNV que habían solicitado la pasada semana y, a su vez, el acto político previsto para horas después en San Sebastián en contra del fallo del Tribunal Constitucional que mantiene en prisión a Arnaldo Otegi y el resto de condenados por el caso Bateragune.
No se descarta que Mintegi desconociera la fecha del encuentro entre las direcciones de PNV y Sortu del que únicamente tenían conocimiento por el lado independentista dos de sus principales dirigentes, además de Hasier Arraiz y Rufi Etxeberria, que acudieron a Sabin Etxea y donde nadie parecía conocer tan significativa dimisión.
Escritora y docente
La navarra Laura Mintegi (Lizarra, 1955), pero residente en Getxo (Bizkaia) desde su juventud, es licenciada en Historia y doctora en Psicología, con plaza en Magisterio en la UPV/EHU.
Conocida por su faceta de escritora tiene a Sísifo Maite minez su obra más relevante. Además, desde 2006 es académica de la Real Academia de la Lengua Vasca-Euskaltzaindia.
En el ámbito político, fue número dos en las listas de Amaiur al Senado por Bizkaia en 2011 y su nombre aparecía ya en 1987 y 1989 en las listas de HB al Parlamento Europeo.
Pero en EH Bildu se sabía la “incomodidad” de Mintegi desde hacía varios meses, un plazo coincidente con el debilitamiento progresivo de su figura como referente de la coalición en el Parlamento y, por lo tanto, el desenlace conocido ayer “entraba dentro de lo posible”. La propia parlamentaria lo había deslizado en encuentros puntuales con compañeros y asesores del grupo, con quienes ha mantenido “siempre” una “excelente relación personal” a pesar de sus distintas procedencias políticas.
Aunque ya desde el principio de la legislatura Mintegi compartió las tareas de portavocía con Julen Arzuaga —un parlamentario mucho más ortodoxo en el esquema de Sortu—, el grado de creciente agresividad del grupo soberanista acabó por sacarla del foco. Aunque Mintegi ha formado parte de dos ponencias parlamentarias de indudable calado político como son las de Paz y Autogobierno, los periodistas siempre se han dirigido a otros miembros de EH Bildu para conocer sus valoraciones.
En este progresivo aislamiento de la figura parlamentaria de Mintegi ha sido crucial, desde luego, el propósito de la coalición de imprimir una mayor agresividad a su papel opositor del Gobierno Urkullu y, en particular, de las políticas del PNV, su rival electoral. Camino del ecuador del mandato, EH Bildu ha reforzado sus críticas con un lenguaje muy agresivo —los nacionalistas, de hecho, lo consideran insultante y ofensivo en muchos casos— que desborda la dialéctica intencionada pero más cuidada de Mintegi. Es ahora cuando toma cuerpo aquellas reticencias de dirigentes abertzales que lamentaron la “falta de pegada” de su portavoz en el debate de investidura de Urkullu.
Precisamente la ratificación de esta línea más implacable contra el Gobierno vasco podría llegar si se confirmara la entrada en el Parlamento de Iker Casanova (Barakaldo, 1973) ya que ocupa el siguiente puesto en la candidatura de EH Bildu por Bizkaia. Estudiante de Ciencias Políticas, autor de la biografía sobre Argala en colaboración con Paul Asensio, fue detenido en 2002 por orden de la Audiencia Nacional como supuesto responsable de la ilegalizada Ekin. Condenado en 2009 por el Tribunal Supremo en el sumario 18/98, abandonó la prisión meses después de que su hermana, la exconcejala Eider Casanova, fuera absuelta por su participación en la organización de Udalbiltza.
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