Grau: La orden de Sinde sobre el Cabanyal “no es la ley de Dios”

El vicealcalde de Valencia, Alfonso Grau, ha defendido hoy en el pleno municipal que la orden ministerial que paralizó en diciembre de 2009 el plan urbanístico de El Cabanyal por expolio “no es la ley de Dios” y ha insistido en que es modificable por otra norma del mismo rango.

El Gobierno local ha sido interpelado por el anuncio de acuerdo, hecho público el pasado 20 de junio por la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá. La regidora aseguró que había llegado a un pacto con el Ministerio de Cultura para sacar adelante un nuevo plan urbanístico para el Cabanyal, que incluye la prolongación de la avenida de Blasco Ibáñez.

Los socialistas han pedido a Barberá que presente el informe técnico de la Secretaría de Estado de Cultura que, según la alcaldesa, avala el acuerdo político en torno a la polémica urbanística suscitada en este barrio.También han pedido que explique la intervención de la Generalitat, una de las tres administraciones que debían de resolver el conflicto.

Joan Ribó, portavoz de Compromís, ha manifestado que la orden ministerial de 2009 sigue vigente y no permite derribos de ningún tipo en el barrio.

La alcaldesa ha respondido que se trata de un acuerdo político que tiene la voluntad de solucionar un problema que se arrastra desde hace cerca de dos décadas. Barberá ha lamentado la "rabia" que los tres grupos de la oposición porque el proyecto siga adelante. "Es un acuerdo que existe y no hace falta que esté en ninguna ley", ha subrayado Grau para acallar todas las dudas que rodean el pacto político enunciado por Barberá.

Una ordenanza que privatiza el espacio público

Valencia tiene a partir de este pleno una nueva ordenanza de ocupación de la vía pública aprobada y pronto en vigor. Los grupos de la oposición han valorado que el Gobierno local haya actualizado una norma que tenía 25 años de antigüedad pero han votado en contra porque no se han tenido en cuenta la práctica totalidad de sus alegaciones.

"Votaremos en contra porque es totalitaria", ha añadido la edil socialista Isabel Dolz, quien en una de las alegaciones pedía que se garantizase un paso peatonal de 1,80 metros de anchura en lugar del 1,50 que establece la ordenanza. "Es un texto privatizador del espacio público", ha subrayado

El portavoz de Compromís, Joan Ribó, ha calificado de barbaridad las restricciones en el uso de las principales plazas de la capital y que el Consistorio tenga prioridad sobre los demás. "Eso significa que si cada día 3 ustedes no quieren que las víctimas del metro se reúnan en la plaza de la Virgen solo tienen que convocar el rezo del rosario. Es así de fácil. Está muy claro lo que va a pasar", ha explicado Ribó.

Rosa Albert, concejal de EU, rechaza que la ocupación de mesas y sillas de las aceras gana la partida a la movilidad de los peatones. "Ojalá no suceda pero todo apunta a que esta ordenanza no solucionará los conflictos entre hosteleros y vecinos", ha augurado Albert.

Un portavoz del colectivo Lambda ha intervenido para mostrar su protesta por que su alegación ha sido rechazada. Pedían que el Día del Orgullo Gay se considerase una fiesta institucionalizada. El concejal de Licencias, Félix Crespo, ha respondido que no podía equipararse este acto con el de otras citas festivas como las fallas o la noche de San Juan, que son centenarias. Sin embargo, ha rechazado, que "los armarios no estén abiertos en esta ciudad".

El pleno ha aprobado también definitivamente el Programa de Actuación Integrada (PAI) del Parque Central de Valencia, que se ha desgajado del grueso del proyecto ante el incumplimiento del Ministerio de Fomento de financiar el soterramiento de vías del ferrocarril en todo el centro de la capital. El punto ha salido adelante con los únicos votos favorables del PP. La oposición ha votado en contra porque desvincula el plan del proyecto ferroviario y alarga los plazos de finalización.

El concejal socialista Vicent Sarrià ha dicho que no se trata de un plan urbanístico más sino de "la operación estratégica más importante para la ciudad desde el plan sur". Joan Ribó, portavoz de Compromís,ha reconocido que se urbanizará el trozo colindante con el barrio de Russafa "pero de las vías, nada de nada". Amadeu Sanchis, de EU, ha incidido en la misma idea: "El Gobierno central continúa sin el compromiso real para dar la financiación necesaria para el proyecto".

El proyecto de ampliación del Palacio de Congresos también se ha aprobado definitivamente, aunque irá al cajón del Consistorio. La oposición se ha felicitado por frenar un proyecto que ahora carece de sentido. El vicealcalde ha replicado que la ampliación se ejecutará antes de lo que cree la oposición.

La abdicación de Juan Carlos I como rey de España y la proclamación de su hijo como nuevo monarca también se ha abierto hueco en el Consistorio. Ante el retrato de Felipe VI, que se colgó del salón de plenos el mismo día de su proclamación, Compromís y EU han  defendido sendas mociones sobre la necesidad de un referéndum sobre la Monarquía. Ambas propuestas han sido rechazadas.