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Sindicatos, estudiantes y oposición se unen contra la zona azul de Sevilla

Los colectivos piden a Zoido que explique su plan de movilidad para las zonas afectadas

Margot Molina
Parodia en protesta por la ampliación de la zona azul de Sevilla, este jueves.
Parodia en protesta por la ampliación de la zona azul de Sevilla, este jueves.PACO PUENTES

Los representantes sindicales de CC OO de los trabajadores de 22 empresas afectadas por la ampliación de la zona azul en Sevilla y los del Consejo de Alumnos de la Universidad de Sevilla (Cadus) se han reunido en Sevilla con los portavoces de los grupos municipales de PSOE e IU, Juan Espadas y José Manuel García, y han acordaron exigir la paralización de las nuevas plazas de aparcamientos en superficie y la búsqueda del consenso con los afectados.

El Ayuntamiento puso en funcionamiento, el pasado día 18, 3.173 nuevas plazas de zona azul que se suman a las 4.112 que existían con anterioridad. Días antes de esa fecha, vecinos y trabajadores, especialmente de la zona de Bami, protestaron por una decisión que consideran “meramente recaudatoria”.

Tanto los representantes de los trabajadores afectados por la creación de nuevas plazas, unos 20.000, como los de los estudiantes, unos 40.000, le han pedido al Consistorio que les explique cuál es su plan de movilidad para cada una de las zonas en las que se ha implantado la zona azul por primera vez: Macarena, Bami, Pirotecnia y Luis Montoto.

“La medida le causa un grave prejuicio económico a muchos trabajadores cuyo sueldo no supera los mil euros y que, además, tendrían que abandonar su puesto cada dos horas para poner más dinero en el parquímetro, algo que es inviable”, comenta el secretario general de CC OO en Sevilla, Alfonso Vidán.

Tanto Espadas, como García han presentado mociones para que el gobierno de Juan Ignacio Zoido elabore un plan de movilidad en el que puedan opinar todos los sectores afectados: trabajadores, estudiantes, vecinos, comerciantes y usuarios del Hospital Virgen del Rocío. Además, IU pedirá en el pleno que se celebra este viernes la convocatoria de referendos en los barrios afectados.

“La zona azul debe ser un instrumento al servicio de la estrategia de movilidad, no un mero plan recaudatorio. La sociedad que gestiona el servicio, Aussa [participada en un 51% por el Ayuntamiento] prevé que recaudará cuatro millones de euros en solo tres años”, apunta Espadas.

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Sobre la firma

Margot Molina
Ha desarrollado su carrera en El PAÍS, la mayor parte en la redacción de Andalucía a la que llegó en 1988. Especializada en Cultura, se ha ocupado también de Educación, Sociedad, Viajes y Gastronomía. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Ha publicado, entre otras, la guía de viajes 'Sevilla de cerca' de Lonely Planet.

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