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Goirigolzarri: “El acuerdo es bueno para Bankia, para Lim y para el Valencia”

El banquero clausura el seminario de la Fundación Etnor sobre ética empresarial "Ningún objetivo ni resultado puede justificar la transgresión de valores", señala el directivo

Valencia -
José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia, delante del presidente de Etnor, Francisco Pons.
José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia, delante del presidente de Etnor, Francisco Pons.

El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha afirmado este miércoles que el acuerdo con Meriton Holdings, empresa del magnate de Singapur Peter Lim que presentó la oferta ganadora para hacerse con el 70% de las acciones del Valencia, "es bueno para Bankia, es bueno para el señor Lim y, desde luego, es fenomenal para el club".

Goirigolzarri ha advertido, sin embargo, que el acuerdo "tiene una serie de hitos que se tienen que cumplir", y que lo ya firmado "se tiene que traducir a contratos".

El directivo ha hecho las declaraciones antes de participar en una jornada organizada por la Fundación Étnor en el Centro Cultural Bancaja. Goirigolzarri ha valorado en el mismo lugar las medidas anunciadas la pasada semana por el Banco Central Europeo para rebajar los tipos de interés e inyectar liquidez al sistema bancario, y ha opinado que van a "acelerar" la nueva generación de crédito y a "relajar más" los tipos de interés.

Durante su intervención en la clausura del XXIII seminario de Étnor, el presidente de Bankia ha afirmado que "sin ética es impensable la sostenibilidad de un proyecto excelente", y que "ningún objetivo ni ningún resultado puede justificar la transgresión de valores".

Goirigolzarri ha apostado por "apoyar la crítica abierta y huir de la penalización del error" en el seno de las organizaciones. "La dictadura y el pensamiento único marchitan la mejora en la empresa", ha apostillado. Por el contrario, "el mestizaje crea valor", ha afirmado, antes de añadir que resulta "necesario que la gente sea reconocida por la consistencia de sus resultados y no por el cumplimiento de objetivos a corto plazo".

El banquero ha ofrecido una última receta de su visión del funcionamiento de una empresa: "Los trepas no tienen cabida en un modelo de excelencia", ha dicho. Y ha agregado que la crisis "está mostrando los efectos nocivos de anteponer resultados a corto plazo a valores consistentes".

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