CiU y Esquerra evitan chocar en el debate electoral de TV-3
Las políticas de austeridad en Europa y la consulta protagonizan las discusiones entre candidatos
El debate entre todos los candidatos catalanes a las elecciones Europeas reprodujo anoche en TV-3 la dinámica que se viene repitiendo desde hace meses en el Parlamento catalán. Los dos primeros partidos de la cámara, Convergència i Unió y Esquerra Republicana, se mostraron unidos en su defensa del “derecho a decidir”, dando por hecha la permanencia de Cataluña en la Unión Europea en caso de independencia y culpando al Gobierno central de los recortes sociales que ellos también aplican en Cataluña.
Ramon Tremosa (CiU) y Josep Maria Terricabras (ERC) evitaron cualquier roce en la cuestión soberanista y recibieron el apoyo en este asunto de Ernest Urtasun (Iniciativa) quien, sin embargo, hizo gala de un discurso social muy crítico y llegó a desearle a Convergència “un mal resultado” por sus políticas sociales.
Las frases de los candidatos
Ramon Tremosa (CiU)."Si el Estado español bloquea la consulta del 9 de noviembre pediremos amparo a las instituciones europeas, pero solo nos respetarán si [el próximo domingo] llenamos las urnas".
Josep Maria Terricabras (ERC). "El proceso soberanista es del pueblo, guste o no guste, y nosotros miramos de acompañarlo. El presidente [Artur Mas] también lo acompaña". "Hay muchos juristas que dicen que sería absolutamente factible un referéndum absolutamente legal. La Union Act que unió Escocia y Reino Unido también decía que su unión sería para siempre".
Javi López (PSC). "Votaré a favor del derecho a decidir, pero para que la consulta sea viable ha de ser acordada".
Ernest Urtasun (ICV). "La gente tiene ganas de decidirlo absolutamente todo, desde la relación entre Cataluña y España hasta el modelo social y económico". "El PP debería poner en el primer punto de su programa electoral que no robará los próximos cinco años".
Santiago Fisas (PP). "El Gobierno del PP está creando 7.000 puestos de trabajo cada día". "Gracias al Gobierno la Generalitat no está en quiebra"
Teresa Giménez Barbat (UPyD). "El catalanista clásico se ha visto engañado y arrastrado por Convergència". "En Cataluña salimos de una para caer en otra, pasamos de tripartitos a la Convergència separatista".
Los representantes de CiU, ERC e ICV lanzaron pullas al candidato socialista, Javi López, por haberse apeado del carro del derecho a decidir. Pero fue con Santiago Fisas (PP) con quien más se ensañaron, especialmente cuando este presumió de ser el único capaz de frenar el proceso soberanista. “Somos los únicos que tenemos fuerza para parar el proceso a decidir”, dijo Fisas. Le replicó Terricabras: “Quieren parar la voluntad popular, ¿Es fuerte, eh?”.
López insistió en que lo importante era una victoria de los socialistas en el Parlamento Europeo “y después podremos hablar de muchas cosas”. Por eso insistió en que “Europa ha dicho que no hay espacio para tomar decisiones unilaterales”, y los partidos del bloque soberanista volvieron a la carga contra los socialistas. López capeó el temporal como pudo. Por un lado recordó que los diputados del PSC se desmarcaron de los del PSOE en el Congreso y rompieron la disciplina de voto a favor de la consulta y, finalmente, ante la insistencia en las críticas, López anunció que votaría a favor del “derecho a decidir” en Bruselas, y después añadió que “para que la consulta sea viable ha de ser negociada”.
Fisas se desmarcó de esa polémica y acusó a “los separatistas” de confundir sus deseos con la realidad. A diferencia de la mayoría de candidatos, negó la supuesta ayuda que recibirá el soberanismo catalán. “Europa no está dispuesta a aceptar la idea de Mas para que haya 74 Estados”, dijo. Teresa Giménez Barbat (UPyD) se mostró muy contundente cuando aseguró que “si no hay guerras mundiales es por la reducción de los Estados. Esa ha sido una de las claves de la paz mundial”, e invitó al electorado de Convergència a que “salga de este bucle”.
Las encuestas señalan que Esquerra Republicana podría superar por primera vez a Convergència i Unió, algo que preocupa especialmente en el entorno del presidente catalán, Artur Mas. Tremosa admitió que un golpe a CiU puede suponer problemas para el liderazgo del presidente de la Generalitat. “Mas necesita apoyo para ir a explicar el proceso a los dirigentes de toda Europa”, dijo. Esta idea sí provoca contrariedad en ERC. Terricabras le replicó que “el proceso [soberanista] es del pueblo, no de ninguno de nosotros (...) no se puede decir que si el presidente catalán queda más débil el proceso se debilita, porque equivale a patrimonializar el proceso”.
El discurso de Ernest Urtasun recordó en ocasiones, por el tono, al que protagoniza la CUP en el Parlamento catalán, en contra de la corrupción política. El momento más ilustrativo fue cuando proclamó que el programa del PP debería empezar con la frase “no robaremos en los próximos cinco años”. El candidato ecosocialista fue el único que recordó también el caso Bárcenas, y que CiU concurre a las elecciones europeas con la sede embargada por el saqueo del Palau de la Música.
Más allá del debate soberanista, la crisis centró la discusión. Aquí sacó pecho Santiago Fisas cuando se jactó de que el Gobierno del PP estaba creando “7.000 puestos de trabajo diarios”, una cifra que fue contestada rápidamente en las redes sociales, pues significaría haber creado más de 2,5 millones de empleos al año. El candidato del PP también presumió de estar “garantizando las pensiones”. Los candidatos de la izquierda también atacaron a Ramon Tremosa por las políticas de Artur Mas y el apoyo de CiU al comisario de Asuntos Económicos Olli Rehn, a quien Urtasun definió como “el brazo ejecutor de las políticas de Angela Merkel”. Tremosa se defendió recordando el déficit que dejó la izquierda en la Generalitat.
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