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El juez da dos días a Adif para que entregue documentos que le negaba

La empresa niega "caos" en la señalización de Angrois y recuerda que ningún técnico ha denunciado incongruencias

El titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Santiago, Luis Aláez, ha desestimado un recurso interpuesto por la Abogacía del Estado, en nombre y representación de Adif, frente a un auto suyo en el que pedía numerosa documentación referida a la línea Santiago-Ourense, en la que se produjo el siniestro ferroviario de Angrois que provocó la muerte de 79 personas. La empresa pública gestora de las vías consideraba improcedente entregarle esa documentación porque interpretaba que el juez pretendía realizar una "inquisición general" sobre el sistema ferroviario español, pero Aláez rechaza ahora sus planteamientos y le da a la empresa "dos días" para que le facilite todo lo reclamado.

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"Las diligencias discutidas no pueden ser calificadas de impertinentes, inútiles o irrelevantes", dice el juez en referencia a los calificativos empleados por Adif en su recurso, "pues todas ellas pueden contribuir, en mayor o menor medida, al esclarecimiento de las circunstancias del accidente del tren Alvia ocurrido el día 24 de julio de 2013 y, en consecuencia, procede desestimar el recurso interpuesto", subraya Aláez. El magistrado critica al administrador de infraestructuras ferroviarias al atribuirle "una visión restringida" sobre el posible origen del descarrilamiento, en relación a la idea de que "el accidente ha de vincularse exclusivamente a una inadecuada conducción del maquinista", Francisco José Garzón, único imputado en la causa y que circulaba despistado tras recibir una llamada telefónica. Si se parte de dicha visión reduccionista, censura el juez, "sobra toda actividad investigadora orientada a la búsqueda de otras posibles causas o al análisis de cualesquiera circunstancias ajenas a aquella actuación". "Pero no es ese, como es sabido, el enfoque que se ha dado a la instrucción, sin que crea que sea necesario reiterarlo en cada resolución que se dicte", reprocha. El juez también insiste en la necesidad de que Adif le entregue documentos "que contienen normas de circulación ferroviaria con destinatarios particulares (personal que interviene en la circulación) no publicados en boletines o diarios oficiales (avisos, instrucciones...)" ya que "cuando el Derecho no es general y no es publicado en un Diario oficial no se presume que es conocido por el juez".

Después de que el plazo inicial dado por el juez haya sido sobradamente superado, Aláez destaca que "no procede conceder plazo ampliatorio alguno para contestar el requerimiento". "A la vista de que la documentación solicitada a Adif que admite poseer debe ser objeto de recopilación y no se le exige ninguna ingente labor de selección", el juez le pide "ponerla a disposición del juzgado en los dos días siguientes de la notificación de la presente resolución".

Por otra parte, Adif ha emitido un comunicado en el que niega la existencia de ningún "caos" en la señalización de Angrois. La empresa asegura que "las opiniones vertidas en este sentido corresponden exclusivamente a la interpretación personal efectuada por alguno de los letrados presentes en la sala. Lejos de corresponderse con la realidad, expresa opiniones de parte que malinterpretan o tergiversan de hecho el contenido de la declaración de los técnicos ante el magistrado". Adif asegura que en el libro horario que indica al maquinista, entre otras cosas, los sistemas de seguridad existentes en cada tramo de la línea "no hay ningún error". La empresa indica que ese documento se sigue utilizando "sin que los técnicos que operan en el sector ferroviario español hayan denunciado ninguna incongruencia" y añade que "estos documentos han sido elaborados conforme a la reglamentación vigente y siguiendo los mismos criterios que se aplican en el resto de líneas de España, por las que circulan diariamente miles de trenes que transportan millones de viajeros".

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