La presidenta del PP oriolano se escuda en los técnicos tras su imputación

La presidenta del PP de Orihuela comienza a dar sus primeros pasos en la defensa del caso Fitur, por el que se le imputan los delitos de prevariación, malversación de caudales y posible cohecho. Josefina Ferrando, exconcejal de Turismo de Orihuela, solicitó esta semana de la Intervención general del Ayuntamiento un certificado sobre la existencia o no de reparos de los técnicos municipales al pago de las facturas de los trabajos realizados por las empresas contratadas para la Feria Internacional de Turismo (Fitur) entre el 2008 y el 2011.

Y Ferrando lo pide porque sabe que no existió objeción técnica, según fuentes municipales. El objeto de la solicitud del certificado de la Intervención general sería el de tener un motivo para esgrimir ante el juez que nadie le advirtió de que las cosas se estaban haciendo mal. A la concejal, hoy en la oposición, se le acusa de haber fraccionado los contratos de las empresas que participaron en el montaje y organización del pabellón de Orihuela en Fitur.

El juzgado de Instrucción número tres de Orihuela sospecha que Ferrando fraccionó las contrataciones de los servicios prestados en las ferias de turismo para que estuvieran por debajo de los 18.000 euros, cantidad con la que se elude la concurrencia pública de un servicio. En total en cuatro años en Fitur se pagaron 340.000 euros a cinco empresas vascas. De ellas, cuatro compartían gestores de la misma familia y la quinta tenía una apoderada con despacho en el mismo edificio donde el PP de Getxo tiene su sede. Otras siete personas más están imputadas, incluidas las gestoras de las empresas.

La documentación recavada por la jueza Yolanda-Julia Candela Quesada en el Consistorio oriolano para los gastos en Fitur y la Feria de Turismo de la Comunidad Valenciana muestra que el Ayuntamiento llegó incluso a pagar el doble del valor inicial de los servicios contratados. La facturación de 2009 es el colmo de la exactitud: seis facturas, de las cuales cinco bordean los 18.000 euros y una los clava, 18.000 exactos. En 2008, como detallan las facturas, se pagaron 8.262 euros por un olivo-bonsai y 12.000 euros por un cuadro de luz con 20 halógenos y dos focos para un libro y el pequeño olivo.

Desde que el pasado mes de mayo el equipo de gobierno de Los Verdes y el PSPV denunciarán las irregularidades ante la Fiscalía, Ferrando y el PP se han escudado en que el secretario y el interventor avalaron las firmas.

Ambos, el secretario, Virgilio Estremera, y el interventor municipal, David Cifuentes, están actualmente imputados con toda la mesa de contratación municipal por el caso de la ciudad deportiva de Orihuela, en la que el Ayuntamiento gastó 96.000 euros por un estudio de viabilidad cuando existían cuatro informes contrarios por estar en zona inundable.