Prado asegura sentirse legitimada para seguir de portavoz del PP

La portavoz del PP, Paula Prado, quien aparece en el sumario del caso Pokémon admitiendo que las empresas presuntamente corruptas “hacen unos regalos de la hostia” y que en las conversaciones telefónicas intervenidas urde un plan junto al exjefe de gabinete del Ayuntamiento de Santiago Ángel Espadas para vengarse de los socialistas, reapareció este viernes tras varias semanas alejada de las comparecencias públicas. Prado, látigo de la oposición y a quien dirigentes del PP ven muy tocada por la imagen que trascendió de ella en este escándalo, dijo sentirse “legitimada” para seguir como portavoz del PP aunque admitió que es la dirección la que “debe tomar las medidas oportunas”, informa Europa Press.

 En su primera aparición tras levantarse el secreto del sumario de la supuesta trama corrupta, a Prado le llovieron las preguntas sobre sus charlas con Espadas, encarcelado en la Operación Pokémon y con el que mantuvo siempre una gran cercanía política desde sus tiempos de Nuevas Generaciones. En una de esas conversaciones interceptadas por la policía durante la crisis abierta en el gobierno municipal de Santiago —del que era portavoz cuando se conoció la denuncia por fraude fiscal contra el entonces regidor, Gerardo Conde Roa— Prado aseguró que si su sustituto fuese Ángel Currás, ella se suicidaría. La prensa también le inquirió por esas palabras aunque Prado declinó “hacer comentarios sobre conversaciones privadas”. No obstante quiso dejar claro que Currás —el elegido por Feijóo, lo que precipitó la salida de Prado del grupo municipal de Santiago— “está haciendo una labor importantísima en un contexto muy complicado”. Pese a las guerras intestinas que se reflejan en los pinchazos telefónicos a los ediles de Santiago y en las que proliferan insultos y descalificaciones de unos concejales a otros y también al alcalde, Prado subrayó “la unidad de voto” que el gobierno municipal ha mantenido en este tiempo e hizo ver que eso no ocurre en otras ciudades, en una obvia alusión a la guerra desatada entre los socialistas en el Ayuntamiento de Ourense.

Prado también disculpó la imputación de siete ediles de Santiago por intentar cargar al Ayuntamiento la defensa de un compañero imputado en el caso Pokémon. Equiparó el informe del secretario municipal que, según el PP, avala ese pago con la decisión de la juez de imputar a los ediles a los que acusa de prevaricar. La magistrada sostiene lo contrario: que el dictamen técnico no faculta a pagar con dinero público el abogado del concejal.