Una alternativa para la pista de pruebas de la alta velocidad

Dos proyectos muertos pueden ser el germen de uno nuevo y vivo. Es, más o menos, lo que propone la Junta de Andalucía para intentar reanimar el denominado anillo ferroviario de Antequera (Málaga), algo parecido a una pista de pruebas para trenes de Alta Velocidad. Las consejerías de Fomento y de Economía han propuesto al Gobierno central que esta pista de pruebas se acometa en el tramo ferroviario que la Junta construyó parcialmente entre Marchena (Sevilla) y Antequera.

El previsto anillo de Antequera, de forma elíptica y 75 kilómetros, recibió el impulso definitivo con el anterior Gobierno del PSOE. El PP se mostró inicialmente tibio con el proyecto hasta que la ministra de Fomento, Ana Pastor, decidió relanzarlo a mediados de 2012 bajo la fórmula de colaboración público-privada. El presupuesto de la obra es de 386 millones de euros y hay autorizados 269 millones de fondos europeos. Pero se convocó un concurso para la construcción y gestión que quedó desierto el pasado verano. Las empresas consideraron que las condiciones del pliego eran excesivamente duras y que no serían capaces de terminar la obra a tiempo.

Si esta infraestructura no se ejecuta antes de que acabe 2015, los fondos europeos asignados se podrían perder. De ahí el interés de la Junta por buscar una salida. Fuentes de la Administración autónoma sostienen que el coste de adecuar la plataforma entre Antequera y Marchena rondaría los 158 millones.

269 millones de fondos europeos se pueden perder si no se ejecuta el proyecto

Con este movimiento, el Gobierno andaluz también le daría uso a un tramo de 77 kilómetros en el que se han invertido 279 millones y que ahora no sirve para nada. Los problemas presupuestarios han hecho que el proyecto de la Junta de unir con alta velocidad Sevilla y Antequera a través de Marchena queden en nada.

La aventura andaluza en la alta velocidad, la única comunidad que se lanzó a esta carrera, ha sido un fiasco y esta sería una forma de darle uso al tramo parcialmente construido. Según la Junta, ya están levantados los pasos, puentes y viaductos. Solo faltaría la instalación de las vías y catenarias. Esta solución, en principio, sería temporal. Se utilizaría durante un periodo de entre 10 o 14 años, mientras se despeja el camino del anillo ferroviario inicialmente propuesto. En el tramo parcialmente acometido se admiten velocidades máximas de 330 kilómetros por hora, frente a los 500 previstos en el anillo. Aunque la Junta sostiene que hay zonas que permiten hasta 400 kilómetros por hora.

Sin embargo, también existen pegas con la propuesta de Andalucía. La Unión Europea ha abierto un expediente sancionador contra España por el impacto de la obra en una Zona de Protección Especial para la Aves del tramo Antequera-Marchena. En el área de Osuna es donde se han detectado esos problemas. Según la Junta, en ese tramo es donde se podrían instalar los falsos túneles previstos en el proyecto del anillo ferroviario para evitar así el impacto.

Esta pista de pruebas se concibió como un complemento perfecto para el Centro de Tecnologías Ferroviarias de Málaga, ubicado en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA) y sede actualmente de 39 empresas. Aunque el futuro del parque no está directamente ligado al anillo, el director del PTA, Felipe Romera, ha admitido que renunciar al circuito de ensayo dejaría el proyecto cojo.